Cuba entre los cuatro grandes

La selección de Cuba, tras un mal comienzo en el V Clásico Mundial de Béisbol, se sacudió y logró incluirse entre los cuatro semifinalistas


El equipo Cuba avanzó a las semifinales del V Clásico Mundial de Béisbol, tras derrotar a su similar de Australia con cerrada pizarra de 4-3, en un choque muy disputado que dio inicio a los cruces del certamen.

Los nuestros vinieron de abajo para remontar ante una escuadra muy inferior, tanto en lo referido a nómina, como por lo hecho en la fase de grupos, instancia previa donde es cierto que batearon bastante, con average colectivo de 283, pero sus lanzadores sacaron promedio de carreras limpias elevado de 5.03.

Los australianos se pusieron al frente en la segunda entrada, por largo tubey de Darryl George, quien fue empujado tras sencillo de Rixon Wingrove.

Sin embargo, los dirigidos por Armando Jonhson empataron en el tercer episodio, tras un batazo contra los colchones del majestuoso Tokyo Dome japonés, conectado por Yoan Moncada, que sirvió para adelantar hasta la antesala a Roel Santos, traído después para el plato por Luis Robert Moirán, con arrastrado por el cuadro.

Y fue clave el quinto capítulo para Cuba. Tanto a la ofensiva como a la defensa. Un buen fildeo de Roel Santos en la pradera izquierda tras una peligrosa conexión del primero en el orden, Tim Kennelly, fue la antesala del racimo más importante de los nuestros al bate, de tres carreras.

Alfredo Despaigne, con línea de sacrificio al jardín derecho, hizo que Roel volviera a pisar el plato. Luego Yoelkis Guibert dio sencillo con las almohadillas llenas y produjo otras dos.

Un punto y aparte para Yoan Moncada. Después de irse de 8-0 en los dos primeros juegos de la etapa inicial, se ha embasado en 11 de las 14 veces, con registro perfecto ante Australia, de 2-2 con un tubey y par de boletos.

El abridor antillano, Yariel Rodríguez, no avanzó todo lo esperado. Después de 3.1 entradas, en las cuales permitió una carrera, dos imparables, ponchó a cuatro y regaló cinco boletos, fue sustituido por Miguel Romero, el ganador del encuentro, pues vino con dos en circulación y consiguió par de outs claves en la cuarta entrada para borrar la amenaza e hizo labor perfecta en la quinta.

Aunque posteriormente no estuvo tan bien Roennis Elías. El zurdo apareció en el box en la sexta entrada y le pegaron hit y jonrón de forma consecutiva, Aaron Whitefield y Rixon Wingrove, respectivamente, para recortar la distancia en la pizarra a una rayita.

Elías felizmente se repuso y acabó también la séptima enfrentando la tanda fuerte de la novena australiana y la retiró de uno, dos y tres.

El octavo inning le tocó al siniestro Liván Moinelo, quien a pesar de regalar par de bases por bolas retiró a dos por la vía de los strikes y dio el cero.

Mientras que el noveno fue tarea sencilla para Raidel Martínez, quien igualmente ponchó a dos oponentes y el marcador se mantuvo intacto.

Por los perdedores, que registraban como su mejor actuación en clásicos un noveno lugar en la edición de 2017 (eliminado en la primera ronda), trabajaron un total de siete lanzadores.

Así que el conjunto de las cuatro letras se incluyó entre los cuatro grandes del orbe y recogerá las maletas para emprender un largo, pero feliz viaje, desde Tokio hasta Miami, sede de las finales del V Clásico Mundial.

Cuba se enfrentará en su siguiente salida al vencedor del duelo de cuartos entre el primero del Grupo D (que debe ser Venezuela, 3-0) y el segundo del C (a definirse posiblemente entre México, Estados Unidos y Canadá), todos con balance de dos éxitos y un revés.

A la fase de grupos en América le quedaba una jornada.

Los cubanos buscarán un cupo para la gran final y de conseguirlo, ya igualarían su mejor resultado en estas lides, que data de 2006, cuando se ubicaron en el segundo puesto en la primera versión.

En aquella oportunidad cedieron ante Japón en el choque definitivo, con pizarra de 10-6, encuentro que tuvo por sede el PETCO Park de San Diego, Estados Unidos.

La de ahora, tras un mal comienzo, ha sido una gran faena.


CRÉDITO PORTADA

Por segunda vez en la historia, el equipo Cuba avanza a una semifinal en clásicos mundiales. / Yuhki Ohboshi.

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