1º de julio de 1968
Operación Diario
Cuando manos amigas hacen llegar a Cuba copias fotostáticas de los apuntes cotidianos del Guerrillero Heroico en el altiplano, el líder histórico de la Revolución encomienda a Rolando Rodríguez, entonces presidente del Instituto Cubano del Libro, su publicación inmediata
Fidel sospecha que, con el Diario del Che en manos de los gorilas bolivianos y de la CIA, se corre el gran riesgo de que el valioso documento sea falsificado o desaparezca.
Cuando manos amigas hacen llegar a Cuba copias fotostáticas de los apuntes cotidianos del Guerrillero Heroico en el altiplano, el líder histórico de la Revolución encomienda a Rolando Rodríguez, entonces presidente del Instituto Cubano del Libro, su publicación inmediata.
En diversas imprentas habaneras comienzan a acumularse toneladas de papel y los obreros gráficos y editores convocados para la realización son movilizados como para una alarma de combate o una secreta operación de Inteligencia.
En nueve días se imprimen los primeros 10 000 ejemplares de una enorme tirada de un millón.
Pronto comienzan a distribuirse gratis desde La Fe (Pinar del Río) hasta Baracoa y en la capitalina calle Obispo, desde el portón de La Moderna Poesía, la cola de ávidos lectores alcanza varias cuadras.
Originales traducidos viajan al exterior (Cuba los dona gratuitamente) para que diversas editoriales como Feltrinelli (Italia), Maspero (Francia), Ruedo Ibérico (exiliados españoles en Francia) y Siglo XXI (México), entre otras, simultáneamente también lo publiquen. (P.A.G)
mi abuelo me conto que el participo como cajista en la publicación del Diario, en ese momento trabajaba en los antiguos talleres OMEGA, actualmente imprenta Osvaldo Sanchez, ubicada frente al parque Tulipan en el Cerro, me lo dijo con mucho orgullo, me dijo además que el primer día, había un militar en la puerta de omega con una lista donde aparecian los nombres de los que podían entrar y que fueron los que trabajaron en las distintas etapas realizadas alli. estubo alrededor de una semana sin ir a la casa. yo comparto su orgullo.