Verdades de Cuba desmontan mentiras de mercenario fracasado en Ginebra
Por LISET GARCÍA
Vuelve la malévola retórica anticubana a surfear en otra ola de mentiras, y fue a hacerlo a Ginebra, nada menos que a la sede permanente del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas. Allí se conoció que un biólogo, que se hace pasar por campesino, residente en Viñales, donde tiene una finca agroecológica, trató de denunciar a Cuba por supuestos delitos de trata de personas que, según él, siguiendo el dictado de la mafia miamense, se comete contra los médicos cubanos que prestan colaboración internacional.
¿Será una coincidencia que en enero último este ciudadano fue visitado en su casa por Mara Tekach, encargada de negocios de la embajada estadounidense en La Habana? ¿Iría a negociar esta nueva escalada contra la Isla? Porque de producciones agrícolas seguro no hablaron. En su cuenta de Twitter ella escribió acerca de esa visita el 14 de enero: @USEmbCuba: “Visité la finca de Ariel y Omara Ruiz Urquiola en #Viñales, donde tienen un verdadero proyecto agro-ecológico. Ejemplo de creatividad y amor al trabajo, demuestran la importancia de que la producción de alimentos esté en manos del pueblo cubano”.
Un usuario de esa red ratificó que es en manos del pueblo que está la producción de alimentos, gracias a la Reforma Agraria que en 1959 entregó la tierra a quienes la trabajaban, y de paso se eliminaron los latifundistas, la mayoría estadounidenses, propietarios del 80 por ciento de los mejores terrenos del país.
Cualquier campesino dueño de tierra en la Isla, se preguntará cómo este individuo, tan blanquito y sin una marca de sol en su rostro y en las manos, trabajará la tierra. ¿Cómo ha hecho para mantenerse a salvo del ardiente sol que castiga la piel, y en el campo más?
No son creíbles sus argumentos, como ripostó el diplomático cubano, Jairo Rodríguez Hernández, miembro de la Misión Permanente de Cuba en Ginebra. “Las acusaciones realizadas por este individuo son falsas y se basan en argumentos absurdos, como salidos de una pésima novela de ficción, con propósitos ajenos a la defensa de los derechos humanos”. Del tema sabe la maquinaria anticubana de Miami, coguionistas de este show, junto a la Casa Blanca.
Falso es también cómo adquirió VIH y su situación médica. Para desmentirlo están los casi 27 mil pacientes con ese virus en Cuba, atendidos gratuitamente con retrovirales nacionales, capaces de garantizarles el derecho humano de vivir, y además, una alta calidad de vida. Falso es también lo que dicen de los médicos internacionalistas. Si oyeran su verdad y a sus pacientes curados, se quedarían sin argumentos.
El Presidente cubano, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, @DiazCanelB, dejó constancia este sábado en su cuenta oficial en Twitter del fracaso de esa burda maniobra para intentar manipular los derechos humanos en la Isla: “La verdad de Cuba desmonta la mentira tarifada. El Imperio se aferra al uso de mercenarios y nuevamente fracasa” escribió el mandatario.
El biólogo que quería más lana y lisonjas en Ginebra, quedó varado en la ola del ridículo porque la mentira tiene piernas cortas.
Mas rapido se coge a un mentiroso que a un cojo. Espero que por favor publiquen noticias así en todas las redes sociales posibles; porque aquí en Suiza lo que se publica en la gran mayoría de las noticias, es que Cuba es un régimen de dictadura que nos quita la libertad a todos y manipula nuestras opiniones. Me satisface muchísimo saber que desde Cuba se escribe también la realidad de los temas políticos. Yordanka Jaschke.