Palabreando: Cultura y cubanidad

Todos conocen por qué el 20 de octubre ha sido declarado Día de la Cultura Nacional. La fecha alude al día glorioso y memorable en que el ejército mambí tomó Bayamo y el pueblo, estremecido de entusiasmo, reclamó a Perucho Figueredo la letra de aquella marcha vibrante que ya todos tarareaban. Ese día nacimos a la vez como pueblo, como cubanos y como cultura.

El término cultura define el “conjunto de modos de vida y costumbres, conocimientos y grado de desarrollo artístico, científico, industrial, en una época, grupo social, etcétera”. El propio Fidel destacó su importancia en pleno período especial, cuando parecía que el mundo se derrumbaba a nuestro alrededor y expresó que la cultura era lo primero que había que salvar y es que para todos está clara la profunda significación de la cultura, que en definitiva es el alma de la nación.

Abel Prieto, entonces ministro de Cultura, en su Informe a la Asamblea Nacional (2004) definió la cultura como “escudo y espada”, lo que vale decir como nuestra más poderosa arma, nuestra mejor manera de defendernos contra cualquier tipo de agresión y también, de presentarnos al mundo como lo que somos, hombres y mujeres que luchamos, que nos esforzamos por alcanzar ese mundo mejor que sabemos, que estamos seguros de que es posible.

Esta cultura cubana, única y diversa, se fundió en el crisol de nuestra nacionalidad, en un profundo mestizaje de todas las influencias y es, por tanto, expresión de nuestra cubanidad, que –al decir del sabio don Fernando Ortiz– es “[…] la calidad de lo cubano, o sea su manera de ser, su carácter, su índole, su condición distintiva, su individuación dentro de lo universal. […]”. Y añadió: “La cubanidad es principalmente la peculiar calidad de una cultura, la de Cuba. Dicho en términos corrientes, la cubanidad es condición del alma, es complejo de sentimientos, ideas y actitudes […]. La cubanidad es la pertenencia a la cultura de Cuba. […]”.

En la batalla en que hoy estamos inmersos es preciso salvar nuestra cultura y nuestras raíces.

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