Claudia Brizuela Galindo, 21 años, granmense, jefe de carro del Comando No 1 (Habana Vieja-Centro Habana), sobre los sucesos del Hotel Saratoga:

«Nosotros sentimos la explosión alrededor de las 10:30am, eso fue lo que nos avisó, el jefe de comando se movilizó rápidamente ya que estábamos organizando una actividad en el comando y mando dos primeros avisos hacia el lugar. Uno de esos avisos era mi carro.

«En primera instancia fue una gran impresión porque llegando al lugar ya habían fallecidos en el pavimento. Nos dedicamos primero a evacuar la escuela, ya que había mucho pánico, los niños estaban corriendo y para evitar una situación mayor nos dividimos en dos grupos, uno para evacuar la escuela y otro a las afueras del hotel.

«Estamos trabajando por grupo, un grupo descansa y el otro trabaja y así nos vamos relevando. Ha sido muy difícil porque hay muchos escombros y debemos ir despacio pensando siempre que hay seres humanos vivos ahí dentro.

«Nunca había tenido una experiencia de esta magnitud, pero sí algunos servicios donde murieron seres humanos, yo comencé en los bomberos con 12 años por un círculo de interés vocacional, hasta que llegó la captación de la escuela de bomberos a mi provincia, e hice un cambio del preuniversitario donde estaba.

«Nos mueve el amor hacia la profesión, los bomberos sentimos pasión y entendemos que la vida de las personas vale más que las nuestras.

«Seguimos buscando con la esperanza de encontrar vida».
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