SARS-CoV-2 Y CONTAGIO: usted puede ser el próximo
Sobre todo si se empeña en continuar haciendo todo lo que no debe, en contra de conocidas y reiteradas orientaciones de la autoridades sanitarias, protocolos e indicaciones que solo buscan proteger la salud de todos, la vida, frenar la propagación de la pandemia y evitar los millonarios gastos que esta le ocasiona a la economía nacional

La preocupación y ocupación no debe quedar solo en terreno sanitario o estatal.
Texto y fotos PASTOR BATISTA VALDÉS
Este viernes 15 de enero Cuba reportó 547 nuevos casos de Covid-19. La víspera (con cierre del día anterior) el país había contabilizado 505. El SARS-CoV-2 sigue empecinado en alojarse dentro del organismo humano. A más de 17 000 asciende la cantidad de personas que han resultado positivas a la enfermedad desde que esta irrumpió en territorio nacional. ¿Quiénes engrosarán la relación mañana, pasado mañana, en las jornadas siguientes? Nadie lo sabe. Habría que buscar anticipada respuesta dentro de las más de 14 000 muestras que cada día analiza la red de laboratorios diseminada por todo el país.
Pero una gran verdad se empeña en saltar a ojos vista: usted, que ahora lee estos apuntes, puede ser el próximo contagiado, e incluso una de las futuras víctimas fatales: 162 hasta hoy. No tenga la menor duda.
Quizás tal afirmación le parezca un poco dramática o sensacional, pero contagiarse puede resultar lo más fácil del mundo, sobre todo para incrédulos, descuidados, irreverentes, irresponsables, negligentes…
Basta con que usted se levante, desayune, salga a la calle y no se coloque el nasobuco o ande con él a modo de prenda de vestir colgada en cuello, por toda la ciudad.
Las posibilidades de éxito (para el virus, desde luego) se incrementarán si, además, usted es de esas personas que sienten predilección por concentraciones humanas o “moloteras” como las que suelen armar coleras y coleros “en una cuarta de tierra” para, en medio de río bien revuelto, halar a punta de astuto cordel la mejor tajada y en vez de multiplicar panes y peces, restarlos.
Otra alternativa que tampoco falla es la de seguir jugando dominó, como si nada ocurriera, toda la tarde, noche, o ambas… con sujetos que bajan de diferentes barrios, unos frente al fichero, otros encimados sobre los jugadores. ¿Sucede o no? ¿Me acepta otro ingrediente, sin alterar la realidad? Muy bien, agregue entonces algún que otro vasito de ron pasando de mano en mano, de boca en boca, o la botella misma, “a pico limpio”.

¿Será 100 por ciento efectivo el nasobuco en un lugar así?
O sea, no hay que llamar a voces al nuevo coronavirus para que venga ¡No hombre no! Él puede llegar solito, por sus propios (cien y más) pies, listos para enrumbar sobre quienes consideran que es un formalismo desinfectarse manos y calzado a toda hora del día, donde quiera que uno llega, o para caerles encima a quienes piensan que eso de mantener distancia con respecto a otros ciudadanos es un artificio de las autoridades sanitarias para meterle miedo a la gente.
Usted –escuche o léalo bien- puede ser perfectamente la próxima víctima si se deja arrastrar por la irresponsable actitud de ese viajero (familiar o amigo suyo) que llegado del exterior, con prueba realizada o no, inventa un fetecún apenas traspasa el umbral de la casa, sale a devorar la ciudad, muchas veces en alarde de po$ibilidade$ financieras, creyéndose por encima de la ley o dueño del mundo, cuando en verdad lo que termina siendo, muchas veces, es un esclavo de la pandemia, propagador de ella y eslabonador de desgracias para familiares y amigos.
La mayor probabilidad de infectarse, por tanto, no está fuera, sino dentro de usted mismo, en particular si se cree el tipo o la tipa más saludable del mundo: un verdadero roble, un cañón, “porque nada tengo que ver con los síntomas de esa enfermedad”… como si el Doctor Francisco Durán García, director nacional de epidemiología no alertara una y otra vez acerca del alto por ciento de casos asintomáticos en el momento del examen.
El problema, como también reitera el propio Durán, es que por lo general esos negligentes e irresponsables ni siquiera se toman el “trabajo” (en verdad privilegio) de mantenerse informados por la radio, televisión, prensa escrita o espacios digitales.
Más claro, pienso que ni el agua: siga jugando con la muerte y pondrá en un hilo su salud, su vida y la de quienes le rodean.
Solo que, conforme a lo que opina y pide el grueso de la población, y a lo previsto en nuestras leyes, ya es hora de darle un giro de tuerca al asunto y pasar del consejo sano, de la orientación, de la llamada de alerta y hasta de la “multica” al procesamiento judicial de quienes, con todo conocimiento, incurren en propagación de epidemia o “fertilizan” constantemente el terreno para ello.
El pueblo de Cuba ya tiene bastante experiencia sobre la COVID19 pero el trabajo de los médicos es crucial para lograr el éxito.
Cambiar nuestro modo de vida para ser menos propensos al contagio del SARS-COV-2.
Consumir frutas, vitaminas, miel de abeja, infusiones de té, coger un poco de sol por las mañanas. Fortalecer el organismo para ser más resistente al virus.
Un miembro de cada familia para buscar los mandados. Menos personas en las calles, más distanciamiento social, saludarse con las manos sin contacto físico. Del cuidado de tú salud, también depende la mía, así que ganamos todos.
Nuestro agradecimiento por sus puntos de vista, Oscar Ramos Isla. Es saludable no solo leer contenidos sino también opinar acerca de ellos. Usted, en sentido general, tiene razón: del cuidado individual depende la salud, la seguridad y la vida de todos. Lástima que no todos entendamos esa gran verdad.
Siga en línea con Bohemia y sume a familiares, compañeros, amigos, gente del barrio. No perderán el tiempo. Por el contrario, lo aprovecharán.
Un abrazo.
Salgo a la calle cada día y me pregunto el color de la hora , el rostro incierto de la persona que me mira , dónde se encuentra emboscada esa peligrosa pandemia , cuántos de los que se me acercan serán portadores asintomáticos…Reflexionemos en lo que está en nuestras manos hacer para no contagiarnos ni contagiar a los demás….Un modesto pensamiento de : Maira Pupo Cutiño ( Mayrita ) – desde Báguanos- Holguín
Munchísimas gracias amiga Maira Pupo Cutiño. Linda y muy objetiva reflexión haces. Hasta poesía veo en ella. No dejes de leernos, no dejes de opinar. Bohemia necesita de lectores y lectoras como tú.