La huella del Che

Para un periodista, el azar y la oportunidad son, también, elementos claves para el desarrollo de su profesión


El nacedor

¿Por qué será que el Che tiene esta peligrosa costumbre de seguir naciendo?

Cuanto más lo insultan, lo manipulan, lo traicionan, más nace.

Él es el más nacedor de todos.

¿No será porque el Che decía lo que pensaba, y hacía lo que decía?

¿No será que por eso sigue siendo tan extraordinario, en un mundo donde las palabras y los hechos muy rara vez se encuentran, y cuando se encuentran no se saludan, porque no se reconocen?

Eduardo Galeano

Hace unos años, cuando estuve en Argentina, me quedó el pesar de no haber podido transitar por algunos de los espacios del Che –por falta de tiempo, ausencia de información y dinero–, pues no estaba en el plan previsto, aunque sí presente en mi pensamiento.

Entonces quedó la deuda con la historia y conmigo porque los que nacimos en Cuba y respiramos Revolución en todo su desarrollo, el Che ES y SIGUE SIENDO (así con mayúsculas) el ejemplo, el paradigma, la luz…

Las circunstancias multiplicadas me ayudaron a saldar el compromiso que, también en el silencio del pensar, me había trazado. Regresé al país suramericano con motivo de un Encuentro de Directores de Radios Nacionales de América Latina e invitados, que se celebró en Buenos Aires, y al que asistí en calidad de Director General de Radio Habana Cuba, cargo que ejercía en aquel entonces.

Y dije multiplicadas porque, desde Rosario, la ciudad donde nació el Che, se comunicó conmigo el destacado periodista en temas internacionales y políticos, conductor radial, ensayista y profesor universitario, y amigo personal, José Andrés “Coco” López, quien era corresponsal voluntario de nuestra emisora internacional en Argentina.

Luego de la primera sorpresa, por la comunicación; vino la segunda, porque me invitó a encontrarlo en sus predios rosarinos; y la tercera, pues en un recorrido por la bella urbe santafesina, estuvo la visita a la casa natal del conocido universalmente como el Guerrillero Heroico.

Esquina de Entre Ríos y Urquiza./ Isidro Fardales.
La placa que identifica la calle. / Isidro Fardales.
El número del edificio./ Isidro Fardales.
Una vista de la continuación de la calles en perspectiva. Tomada desde la puerta del edificio./ Isidro Fardales.

El hijo de Ernesto Guevara Lynch y Celia De la Serna Llosa nació en una clínica privada el 14 de junio de 1928 y, de inmediato, fue trasladado al departamento del segundo piso de la calle Entre Ríos 480, esquina Urquiza.

Posiblemente hubiera sido más acertado publicar mis imágenes en conmemoración de su natalicio, pero en ese momento las horas no me alcanzaron. Aunque, como afirmaba el propio Galeano, el Che es el “más nacedor de todos”.

El ascensor original que nos llevó a la segunda planta. / Isidro Fardales.
La puerta del apartamento. / Isidro Fardales.
Recorrido por el interior del apartamento. / Isidro Fardales.
Recorrido por el interior del apartamento. / Isidro Fardales.
Recorrido por el interior del apartamento. / Isidro Fardales.
Recorrido por el interior del apartamento. / Isidro Fardales.
Recorrido por el interior del apartamento. / Isidro Fardales.

Son innumerables las fotografías que circulan en Internet, de aficionados y profesionales, pero estas pocas, mías, las comparto desde el más profundo respeto y admiración, porque nunca sobrarán ni los días, ni los años, ni los tiempos, para rendirle homenaje a uno de los más grandes revolucionarios de todas las épocas.

A mi lado, el colega y amigo «Coco» López. / Isidro Fardales.

Comparte en redes sociales:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Te Recomendamos