El equipo panameño de los Federales de Chiriquí  derrotó a Agricultores 10-4, en el último partido de los nuestros de la Serie del Caribe, en Venezuela

Ya todo estaba decidido antes de la última fecha, al menos para Cuba. Mientras otros cinco equipos, incluidos nuestros rivales, se repartían los cuatro cupos a semifinales, en compromisos mucho más interesantes, para nosotros la cuestión era al menos, despedirnos con una victoria y no quedar últimos.

Pero tampoco se pudo. Es probable que la desmotivación haya hecho lo suyo. No es fácil llegar a este desafío con el sello a cuestas de la peor actuación de un equipo cubano en la lid regional desde nuestro regreso en 2014.

En esta presentación final, a la escuadra que dirige Carlos Martí le robaron seis bases, tres a Yosvani Alarcón e igual número a Rafael Viñales. Los serpentineros regalaron 11 boletos, propinaron dos pelotazos y recibieron 15 indiscutibles. Demasiados.

Un total de siete lanzadores vinieron a tratar de contener a la ofensiva panameña, una de las más discretas del torneo, que incluso ante los cubanos dejó a 16 hombres en circulación.

En tanto, nuestra novena tuvo escasos momentos de felicidad. Fabricaron una en el arranque del juego, pero no volvieron a ver la luz hasta la séptima entrada, donde produjeron racimo de tres, con breve protagonismo para los impulsadores Yordanis Alarcón, Yuniesky Larduet y Raico Santos, por ese orden.

La derrota fue a la cuenta del zurdo Leandro Martínez, mientras se apuntaba el éxito el derecho Harold Araúz, quien por cierto, fue el mismo serpentinero que derrotó a Cuba en la final de la Serie del Caribe de 2019, cuando Las Tunas se ubicó segunda tras ceder ante los Toros de Herrera, en el Estadio Nacional Rod Carew, de la Ciudad de Panamá.

Así que Cuba certificó la peor actuación después de su regreso a estos eventos regionales desde 2014, con balance de un éxito y seis reveses, lo que pudiera definir en contra de próximas invitaciones.

¿Por qué? Pues porque una cosa es perder y otra distinta es competir de manera discreta, para no utilizar una definición más severa.

En esta ocasión opino que estuvimos muy por debajo de las expectativas, no en cuanto al resultado final, pues tal vez lo imaginamos a priori al comparar nuestro torneo doméstico con el resto de las ligas implicadas.

Y, además de lo ya dicho, el hecho de no reforzar debidamente el plantel que llevamos, como sí hicieron los demás equipos, sino que deportivamente hablando no aportamos demasiado al espectáculo.

Se trata de un elemento que los organizadores podrían tomar en cuenta para descartarnos en un futuro cercano. Ojalá que no, pero mucho tendremos que cambiar desde dentro para acercarnos al nivel del área.

CRÉDITO PORTADA

A los receptores cubanos les robaron seis bases en el juego. / Equipo de prensa de la Serie del Caribe.