Recuerdos y lecciones de abril

Recuerdos y lecciones de abril.
Al despedir a las víctimas de los ataques previos a la invasión ante una multitud, el Comandante en Jefe expresó la necesidad de radicalizar el rumbo socialista de la Revolución, única alternativa para Cuba. Foto. /Archivo de Bohemia.

A Cuba no la volverán a tener jamás, ni tras un diluvio de metralla y de mentiras, es lo que dan a entender los cubanos dispuestos a impedirlo, y que aún siguen reafirmándolo. Esa es una de las lecciones de abril, como el de hace 61 años cuando una parte de la población que vive en el país hoy aún no había nacido.

Pero han crecido sabiendo que al amanecer del 15 de abril de 1961 aviones de combate yanquis con insignias cubanas bombardearon los principales aeropuertos militares de Cuba. La mentira, que sigue siendo una de sus armas, sirvió para construir la noticia de que se había “sublevado la fuerza aérea de Castro”, nota a la que pretendieron dar credibilidad con la declaración de un supuesto aviador militar cubano desertor que había aterrizado en Miami.

Se trataba de un piloto de la flota de la CIA que actuaba contra Cuba desde esa mañana, mientras el representante de Estados Unidos en la ONU, se esforzaba por convencer de esa “verdad” a su Consejo de Seguridad.

Recuerdos y lecciones de abril.
“Cuando se hable de heroísmo, grande entre los grandes, tenemos que recordar a los niños artilleros de la Base Granma”, escribió Dora Alonso en BOHEMIA al referirse a la batalla de Girón. Foto. /Archivo de Bohemia

El bombardeo pretendía destruir en tierra los siete u ocho aviones destartalados de las fuerzas revolucionarias, propósito fallido pues el mando militar cubano ya había ordenado dispersar y enmascarar esos equipos.

Los artilleros antiaéreos, casi todos menores de 20 años, respondieron con un torrente de fuego y derribaron una primera nave enemiga. Uno de ellos, el joven Eduardo García Delgado, víctima de la metralla yanqui, escribió moribundo con su sangre la palabra Fidel en una puerta. Esa fue su última lección.

Así transcurrió el preludio de la invasión yanqui por Playa Girón, lugar escogido para establecerse con un gobierno que daría la libertad al pueblo cubano. Así como cuando pactaron con España el cese de la guerra que los mambises habían ganado luego de más de 30 años de sangre y machete.

Los cerebros de la CIA y el Pentágono que planificaron, organizaron y apoyaron la invasión, daban por sentado que el oprimido pueblo de Cuba se uniría masivamente a sus libertadores.

Recuerdos y lecciones de abril.
Tarja ubicada en la intersección de 23 y 12, que inmortaliza el episodio allí acontecido. Foto. /Archivo de Bohemia

Lo sucedido después con la brigada mercenaria apareció con precisión cinematográfica en las páginas de la edición del 30 de abril de BOHEMIA, bajo la firma de la escritora Dora Alonso, entonces una fogueaba periodista, acompañada de otro artista, Gilberto Ante, cuyas imágenes estremecen todavía pese a que la impresión y la calidad del papel no facilitan apreciar los detalles.

“Avanzando con el pueblo en armas”, tituló su reportaje la autora a quien muchas páginas de buena literatura hay que agradecer. Su descripción permite revivir hechos y ver qué pasó en aquellos caminos donde se levantaban nubes de polvo y avanzaban palmo a palmo los milicianos y sus jefes, entre quienes estaba “el hombre”, dirigiendo personalmente todas las operaciones. “Ya se sabe en Cuba y en el mundo entero quién es ‘el hombre’”, escribió.

Todavía caminan por Cuba los héroes de Girón para atestiguar que en aquella playa detonó la espoleta que aceleró el proceso revolucionario. La victoria puso en claro el mayoritario apoyo del pueblo a su Revolución, y desde entonces, aprendida aquella lección, ha sido espejo para mirarse y saber cómo se defiende.

Recuerdos y lecciones de abril.
En la céntrica esquina de 23 y 12 se rindió tributo este sábado 16 de abril al aniversario 61 de la proclamación del carácter socialista de la Revolución Cubana y se ratificó el compromiso de Patria o Muerte. Foto. /tribuna.cu

Se conoce de sobra que el país del norte prefiere las razones de la fuerza que la fuerza de las razones. Por eso la validez de otra demostración como la de este sábado 16 de abril, acto del pueblo habanero que estuvo presidido por el Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba y presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez. «Amanecemos hoy en 23 y 12, la histórica esquina habanera donde #Fidel declaró el carácter socialista de la Revolución. De la unidad nació nuestro @PartidoPCC y de los milicianos la victoria. Somos #UnidadYContinuidad», publicó temprano el mandatario en su cuenta en Twitter.

En la conmemoración quedó explícito que este pueblo le canta a la patria y que está preparado para resistir, con la fuerza heredada de la carga al machete de los mambises, sabe que la bandera existe para mantenerla en alto y que no se dejará arrebatar lo conquistado en otros momentos de su historia, y seguirá caminando pese a los errores que urge subsanar.

Los manuales de la CIA se han actualizado, pero su esencia sigue intacta. A Cuba la han acusado de pretender un programa nuclear con fines no pacíficos, como hicieron con Irán. De narcotráfico, como en su tiempo a Panamá, donde se sabe lo que ocurrió. Otra acusación hablaba de querer fabricar armas biológicas, parecido a lo de Iraq después, y también se sabe en qué paró.

Recuerdos y lecciones de abril.
El pueblo habanero participó en el acto presidido por el Primer Secretario del Comité Central del Partido y presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez. Foto. /tribuna.cu

El país entró, salió y volvió a estar en la lista de naciones que patrocinan el terrorismo, y ahora entre los que reprimen a la oposición y no respetan los derechos humanos. Todo según Estados Unidos, pese a que no hay muestras ni de muertos, ni de torturados, ni de desaparecidos, ni de negación de garantías.

Siguen en la fábrica de pretextos ¿para bombardear a Cuba? Han dicho varios especialistas que hacerlo montados en una mentira, no será aceptado por quien tenga dos dedos de frente. Al parecer el estilo preferido ahora es el bombardeo con mentiras –que afuera y adentro algunos se creen–, aunque no estén descartadas las bombas.

Pero, la anexión y el injerencismo no están en la agenda de los buenos cubanos, estén donde estén y vivan donde vivan, esos mismos que apuestan por no olvidar abril y su lección de unidad junto al hombre que la Patria sigue contemplando orgullosa.

Comparte en redes sociales:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Te Recomendamos