Estreno de lujo en nueva pista sintética para hockey

Después de un lustro de espera… el terreno, el oro, la gratitud


No sé qué habrá causado más alegría en deportistas, entrenadores, árbitros, organizadores y sobre todo en Ángel Marín Hernández, Comisionado Provincial de hockey sobre césped en Ciego de Ávila: si la coronación del equipo femenino, en reñida disputa contra Sancti Spíritus (2-1) o si el estreno, por fin, del terreno sintético, aledaño a la sala techada Giraldo Córdova Cardín.

Es obvio que empinarse con el oro durante el campeonato nacional femenino de esa disciplina es algo como para saltar de incontenible júbilo.

Hacerlo en la pista con que se ha soñado desde hace cinco años tiene también alta significación tanto para los anfitriones como para Sancti Spíritus (segundo lugar), Camagüey (tercero), Las Tunas (desplazada de la cima al cuarto peldaño) y las demás provincias, cuyos deportistas cuentan, desde ahora, con una de las dos más modernas pistas del país (la otra, similar, está en Santiago de las Vegas, La Habana).

Tan así es que, en apenas unos días, el 20 del presente mes, la recién estrenada instalación debe acoger a los equipos que intervengan en la confrontación nacional masculina.

Júbilo por el triunfo avileño.

Ese gradual y ascendente uso –imbuido siempre del concepto de no abuso y del correspondiente celo por el cuidado y preservación del terreno– será el mejor modo de ir “amortizando” deportivamente una obra cuyo valor, antes de la Tarea Ordenamiento se estimaba en alrededor de un millón 600 000 pesos, aunque en la práctica saltó cálculos y pronósticos a fuerza de los “bastonazos” causados por imprevistos de todo tipo.

Baste saber que solo en asfalto requirió casi tres veces más de lo considerado en un proyecto que, por demás, resultó desde 2017 blanco directo de agentes nada positivos como intensas lluvias tras los efectos de una brutal sequía, huracanes y las casi nunca ausentes causas subjetivas o de organización, más dependientes del componente humano que de recursos o equipamiento en un momento determinado.

Contra esos vientos y mareas, ahí está, hermoso, saludable, con sus brazos abiertos el terreno sintético avileño, con sus 92 metros de largo por 55 de ancho pidiendo actividad, disciplina, cuidado, aplausos y la gratitud de un público que seguramente irá incrementando su presencia, para animar a su equipo, reconocer la calidad del contrario y dignificar al deporte cubano.


CRÉDITOS

Fotos: Osvaldo Gutiérrez

Comparte en redes sociales:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Te Recomendamos