Con un enfoque naturalista, pero repleta de sensibilidad humana y ganas de edificar en la Cuba de hoy, se estrena la segunda temporada de Calendario, serie televisiva más popular de los últimos tiempos
La segunda temporada de la serie Calendario ya está en cuenta regresiva. Desde hace pocas semanas, varios medios nacionales anunciaron la buena nueva, cuya transmisión se previó para este domingo 26 de febrero, por el canal Cubavisión, sobre las 8:30 de la noche, justo después del Noticiero Nacional de Televisión (NTV).
Siempre será poco lo que pueda comentarse del esperado y popular seriado, ampliamente seguido por la familia, desde su estreno en enero de 2022, en las pantallas y las redes sociales digitales, justamente por reflexionar sobre la sociedad cubana contemporánea a partir de las experiencias y cotidianidades de sus jóvenes generaciones.
Las historias verosímiles de un grupo de adolescentes, ahora estudiantes de onceno grado en un preuniversitario capitalino, volverán a conmover con la esencia sugerente y esperanzadora que le imprimiera su directora Magda González Grau, el guionista Amilcar Salatti, el equipo de realización y, por supuesto, los actores y actrices que dieron cuerpo y vida a cada personaje.
Las problemáticas relacionadas con la identidad sexual, la discriminación por el color de la piel, el abuso sexual, las adicciones y la emigración son algunos de los temas que hallarán espacio en la nueva entrega para la cual se precisó de un minucioso proceso de investigación y asesoría que involucró a distintas instituciones especializadas, así como el apoyo de los ministerios de Educación y Cultura.
Los apremios existenciales en la etapa de la vida camino a la adultez se presentan en esta temporada con una estructura diferente a su antecesora en que los conflictos se agruparon en un mismo capítulo; ahora estos avanzarán en una progresión paralela, de acuerdo con el grado de importancia desplegado en las tramas, subtramas y sus respectivos personajes.
La actriz Clarita García regresa con una Amalia más madura en lo profesional y vida íntima, pero sin desasirse de ese halo sensible, afable y comprensivo que la singularizara, como ser humano y maestra, en la saga anterior.
Los personajes que encarnan a los adolescentes y repiten la experiencia en esta segunda entrega de Calendario han crecido psicológica y espiritualmente, se advierten en roles más comprometidos ante la familia, la escuela, la comunidad y el entorno.
A esta armonía actoral se sumó un grupo de jóvenes intérpretes muy talentosos que a fuerza de empeño sortearon las exigencias y los retos impuestos a lo largo del proceso de realización por el texto de Salatti y la conducción González Grau, quienes revelaron en encuentro con la prensa algunos detalles de la tercera temporada, aún en producción.
“Estamos en otro nivel escolar, una escuela distinta, nuevos desafíos para estos muchachos que están bregando con los problemas de nuestra sociedad”, aseguró la realizadora durante la premier en el Multicine Infanta; en verdad, la esencia, el sentido de verdad y el crecimiento espiritual de la serie que, en breve, animará a los seguidores.
