Cosas locas

Este pájaro, por ejemplo, no creo que se sienta feliz, puede que tenga la lengua dormida. Y si te molesta que la foto esté oscura, acostúmbrate, es el espíritu de esa ave, que pudiera ser yo misma.
Voy a hablar de algunas locuras, te advierto. Pensamientos que por alguna razón me han venido a la cabeza, al editar estas fotos. Te alerto que no me encuentro bien desde hace unas horas. No sé qué es lo que me pasa. Estoy descontenta con algo, o me falta algo, o necesito ser una gata con suerte. Te digo que hoy no sé qué me pasa.
Esta es otra de mis fotos de la colección oscura. No sé bien lo que me provoca, si aburrimiento o desolación. Supongo que esto va a seguir así un buen rato. No te preocupes, solo recuerda el título de este trabajo.
No sé si a veces las cosas suceden por una casualidad o causalidad, o simplemente suceden y punto. Quizás yo tenía que mostrar esta foto hoy aquí y por eso se me dio la oportunidad de hacerla. Pero la cosa es que siempre me detengo en los detalles y por eso es que la tengo hoy en mi archivo. Son importantes los detalles. Muy importantes, debo recalcar.
Por ejemplo, yo nunca había visto una cerveza china. Pensándolo bien nunca he tenido en mi mente un chino bebiendo cerveza. Si acaso alguno entró en ese reino fue con alguna bebida de arroz o agua caliente… pero cerveza, no, aunque esta esté hecha con arroz. Lee la etiqueta, por favor. Son cuestiones culturales, cosas por las que es mejor culpar a los medios de comunicación. Pero este recipiente es de cerveza y de China, y lo que tiene dentro es salsa china (re-envasada). ¿Será una broma?
El perro de mi vecina. No sé quién está más loco, si él o yo.
Mi vecina.
No creo que haga falta decir mucho más. Tengo que reírme de mis ocurrencias. Pero es mi naturaleza bromista aflorando ahora. Después de todo hay que tratar de mantener el buen carácter, por nuestro bien. Ella solo se protege del sol cuando va a tender la ropa a la azotea. Uy, pero qué susto me ha dado.
–¡Hazlo!
–¿Hacer qué?
–Lavar, colgar la ropa…
–Sí. Son cosas que hago a menudo.
(Manos a la obra) ¿Qué? Basta con leer lo que dice el cartel.
Esto es terapéutico. ¿Dije en algún momento que me sentía mal? (Risas)

Postdata.

Hace un tiempo conocí virtualmente a un fotógrafo venezolano que vive en un pueblo pequeño, casi olvidado, de la geografía de ese país. Lo admiro tanto porque su obra se trata de andar por las calles de aquel lugar y captar momentos cotidianos. Lo hace con tanta gracia, con tanta poesía, que inspira. Él va dejando que su pensamiento discurra a través de cada toma, contando lo que lo motivó a hacerlas. Esto es algo que me fascina y he querido de algún modo reproducirlo aquí. Un día de estos –quizás– les comparta su trabajo y una entrevista que ojalá acepte darme. Pero ahora eso tendrá que esperar… Cosas locas, que no lo son, ni tanto, es mi propuesta para este día. Espero que hayas podido disfrutar un poco a través de mi trabajo y encontrar luces para tu camino.

Comparte en redes sociales:

Te Recomendamos