Cuba no salió bien del Campeonato Mundial
Es grato escribir sobre grandes faenas de nuestros abnegados deportistas. Pero no siempre es posible. En los últimos tiempos se han encadenado varios tropiezos.
El más reciente acaba de ocurrir en el Campeonato Mundial de Judo número 43, celebrado del 13 al 19 de junio en Budapest, la bella e histórica capital de Hungría, con la presencia de siete cubanos.
Nos fuimos sin medallas.
¿Sorpresa? Sí y no.
Vaticinio
Antes de la cita, al anunciar el evento en BOHEMIA, escribí –sin bola de cristal, por supuesto–: “¿Y qué puede esperarse dentro de unos días? Por lo regular, en estos torneos las posibilidades son escasas. Lo visto en el circuito europeo, con los Grand Prix y los más exigentes Grand Slam, deja reservas para el optimismo; aunque, se lograron algunos resultados alentadores.»
Sin embargo, advertí que no sería extraño si alguno de los nuestros lograba subir al podio.
Pero las bajas pesaban: Idalys Ortiz (+78 kg), multimedallista olímpica y mundial, ya retirada con sobradas razones; y el 90 % del equipo femenino proviene de categorías juveniles.
Tampoco estaría Iván Silva (100 kg), subcampeón mundial en Bakú 2019, recuperándose aún de la lesión sufrida en el Panamericano de Chile.
Ese panorama cargaba de responsabilidad a Andy Granda (+100 kg), veterano de 33 años y campeón mundial en Taskent 2022.
Dos traspiés…
Budapest asomaba como una posibilidad –aunque lejana– de no repetir el retroceso sufrido en los Juegos Olímpicos de París 2024, en el que no ganamos preseas.
Con el primer oro en Montreal 1976 se sucedieron las medallas logradas en Moscú 1980, Barcelona 1992, Atlanta 1996, Sídney 2000, Atenas 2004, Beijing 2008, Londres 2012, Río 2016 y Tokio 2020. No asistimos con una representación cubana a los celebrados en Los Ángeles 1984 y Seúl 1988.
Radiografía al golpe
Por lo sucedido en Budapest: «Este resultó el tercer mundial consecutivo en el cual los caribeños se despidieron sin medallas, un hecho inédito desde la edición de Essen 1987», se leyó con transparencia en Jit, sitio oficial de nuestro organismo deportivo.
«Incluso, ha sucedido en cuatro de las últimas cinco citas del orbe: Budapest 2021, Doha 2023, Abu Dabi 2024 y la presente. Solo la de oro conquistada por el propio Granda en Taskent 2022 rompió la sequía del último quinquenio», escribió el colega Raúl Hernández Lima.
“Desde la medalla de bronce de Jorge Fis Castro en la categoría abierta en Essen 1987, hasta el subtítulo de Idalis Ortiz (+78 kg) en Tokio 2019, los atletas cubanos consiguieron alguna presea».
Pormenores
En esta ocasión, Andy Granda tampoco pudo alcanzar sus sueños y ambiciones, luego de tanta dedicación al entrenamiento. Cayó en su primer combate, sorprendido por Ushangi Kokauri, igual de 33 años, un azerí que compite por Serbia y obtuvo presea de plata en el Mundial de Bakú 2018. Todo ocurrió rápido: técnica de desbalance en poco más de 30 segundos, waza-ari, y luego inmovilización por 15 segundos (waza-ari-awasete-ippon).
Dos apuntes sobre Granda: 1) Por razones familiares debió regresar a Cuba antes y dejar inconclusa la gira europea. 2) Es un consagrado con planes de desquite olímpico para los olímpicos de Los Ángeles 2028. De su capacidad de resiliencia da fe su título mundial.
Lo bueno
La mejor actuación cubana fue la de Orlando Polanco (66 kg), de 25 años, quien nunca había llegado tan lejos: terminó quinto, a un paso del bronce. Lo detuvo nada menos que el japonés Hifumi Abe, bicampeón olímpico y cuatro veces oro mundial.
Sí, un avance para Polanco y un buen impulso de cara a la cita de Los Ángeles 2028.
También resultó positivo que figuras jóvenes pudieran foguearse a este nivel.
Un comentario
Hay que analizar que en los anos 80 recibiamos una ayuda solidaria de la Union Sovietica y paises socialista y se podia participar en varios eventos mundiales con equipos casi completo en ambos generos y siempre el tope con otros paises es muy beneficioso, actualmente bajo las circunstancias socio-economicas que padecemos, hace sentirse sobre el deporte altamente competitivo, no podemos pedirles manzanas al Olmo. lo otro es que muchos paises han elevando su nivel competitivo a un nivel de excelencia porque tienen mas recursos que nosotros. Nuestro Judo no es malo, siempre ha tenido un buen nivel, pero las circunstancias antes dicha nos golpean, hacemos lo que podemos, a todos nos gusta ganar, lo mas importante en una competencia es participar, se gana experiencia, nivel comptetivo y se va conociendo a los contrarios, ya solo no es vencer a Japon, hay que vencer a Georgia, Rusia, Paises Bajos, Francia, Uzbekistan, etc. el nivel de Judo a crecido mucho y nosotros estamos quedando atras por las circunstancias que nos rodean.