La ONU expresó preocupación por los últimos “ajustes de cuenta”. El actual gobierno declara que ya todo acabó. ¿Qué pasará? Sin dudas, más muertes
Los temores de muchos alauitas se cumplieron: el gobierno instalado en Damasco, dizque provisional, ha asesinado a alrededor de 1 300 de sus miembros, aunque las cifras oficiales de momento solo reconocen 950. El asunto no radica en la exactitud de la cifra, sino en la esencia: la intolerancia religiosa hacia una de las ramas del islam. Las nuevas autoridades alegan que se trató de un operativo para barrer con los “leales al antiguo régimen de Bashar al Asad”; se trata de utilizar esa carta a conveniencia, porque el depuesto y ahora exiliado presidente de Siria era ya sumamente impopular.

Ante reclamos internacionales, en primer lugar de Rusia, el portavoz de Defensa, coronel Hasán Abdulghani, señaló en un comunicado de prensa que en las relevantes ciudades portuarias sirias de la costa mediterránea de Latakia y Tartús las acciones habían concluido con éxito, pues se cumplió el objetivo de acabar con el principal grupo de apoyo al anterior mandatario; sin embargo, acotó que seguiría la búsqueda hacia las montañas. La ONG Observatorio Sirio de Derechos Humanos, firme oponente de Al Asad, ha declarado que la persecución religiosa se acometió a sangre fría. ¿A qué juegan?
Simultaneo con esto, la noticia “bomba” en su recorrido mundial mucho tiene que ver con el surgimiento de una resistencia armada contra los hombres de Abu Mohammed al-Julani, quien ahora viste traje y corbata, se rasga las vestiduras y abjura de su pasado reciente al frente de una organización terrorista (HTS). En la actualidad, pretende insertarse en los circuitos internacionales –dígase dinero e inversiones–, de ahí sus intentos de legitimidad. A pesar de tales esfuerzos, lo acontecido este fin de semana no parece le granjee muchas simpatías. El Hayat Tahrir al-Sham, o simplemente HTS, se incluyó en la lista de terroristas en 2014, debido a sus vínculos con Al-Qaeda y sus actividades violentas dentro del país. Todo lo cual le acarrea sanciones como la congelación de activos, prohibiciones de viaje y embargo de armas.
De momento, Estados Unidos ha dejado de lado la carta siria, siendo Israel el más satisfecho con la carnicería. Un informe del periódico estadounidense The Wall Street Journal reveló que los israelíes buscan convencer a los drusos de Siria de plantear demandas de autonomía dentro de un sistema federal. Se afirma que Israel planea gastar más de mil millones de dólares en el logro de este objetivo. Ello le sería muy conveniente al primer ministro Benjamín Netanyahu pues los drusos habitan en el sur de Siria, en los Altos del Golán ocupados por Israel. Sin dudas, Tel Aviv aprendió muy bien del legado estratégico de “divide y vencerás”.

Y, aunque la concentración de su energía recae en el Líbano y contra los palestinos, Siria está en el ojo del ciclón, pues, conociendo la imprevisibilidad de Donald Trump, no sorprendería que se llegara a hablar de actuar contra la nueva administración siria con comandos de fuerzas imperiales que desde la base militar ilegal en el territorio árabe, día a día, siguen robando petróleo y cereales.
El 7 de marzo 2025 la agencia iraní HispanTV reveló la constitución del “Regimiento Escudo Costero”, un grupo dirigido por el excomandante de las fuerzas especiales sirias Suhail al-Hassan, cuyo propósito manifiesto es “luchar contra el gobierno de facto”. También puntualizó sobre la formación del “consejo militar para la liberación de Siria”, liderado por el antiguo general de brigada del Ejército Qiath Suleiman Dalla, con un empeño más amplio: “luchar contra las tropas extranjeras ocupantes y derrocar el régimen gobernante”.
Con toda la prudencia necesaria del periodismo se verá en el camino; iremos evaluando el real alcance de ambas estructuras militares, tanto en lo militar como en lo operativo, y algo crucial: el apoyo popular, porque sin este nunca hay victoria posible, por muy loables que sean las metas.
Un comentario
Surgen previsibles.nuevos frentes de combate fraticida en el medio oriente formado por conocidos terroristas y reaccionarios contra fuerzas
populares aún por conocer, definir y categorizar, inicia otro motivo para analizar