El viaje de Fidel Castro a Vietnam, en plena Guerra, sigue inspirando. El nuevo presidente vietnamita y también secretario general del Partido Comunista To Lam es genuino hijo de esa amistad. Cuba lo recibió gustosa
Ho Chi Minh el 10 de mayo 1969, en su Testamento al pueblo vietnamita, dejó sentadas ideas sabias como guía espiritual. Al final se lee: “Mi último deseo es: Todo nuestro Partido y todo nuestro pueblo estrecharán su unidad y lucharán por la edificación de un Vietnam pacífico, reunificado, independiente, democrático, próspero y contribuirá dignamente a la causa revolucionaria mundial”. El pasado 2 de septiembre se cumplieron 55 años de su deceso. Desde entonces la hermana nación ha cumplido a cabalidad el sueño del Tío Ho, sucediéndose una pléyade de líderes partidistas y dirigentes estatales comprometidos con llevar adelante a su país, así como tender las manos al necesitado. Nuestra Revolución lo vive de sobra.
De esa estirpe es el actual secretario general del Partido Comunista (PCV) y presidente de la República Socialista de Vietnam (RSV), el compañero To Lam. Del 25 al 27 de septiembre 2024 nos hizo una visita de Estado. Sus palabras al tocar tierra habanera: “Estoy muy feliz de volver a visitar al hermoso y heroico pueblo de Cuba”.
El anfitrión, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, mandatario cubano y Primer secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC) le reiteró: “Cuba y Vietnam son un ejemplo de hermandad que el tiempo se ha encargado de fortalecer. Por más fuertes que soplaron los vientos, o justamente por eso, nuestras naciones han sabido cultivar y enriquecer el hermoso legado de amistad y solidaridad del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, máximo líder de la Revolución Cubana, del General de Ejército Raúl Castro Ruz y el entrañable camarada Ho Chi Minh”. Asimismo, agradeció el gesto de que una de sus primeras visitas internacionales haya sido precisamente aquí, con toda su carga emocional y política. Ni To Lam, ni Vietnam dejan de apoyarnos incondicionalmente en la lucha contra el injusto bloqueo económico, comercial y financiero, impuesto por el Gobierno de los EE.UU. También exigen seamos excluidos de la lista de naciones supuestamente patrocinadoras del terrorismo, elaborada desde Gringolandia, la cual con saña persigue cada buena obra. Por eso el gran valor de To Lam, heredero de su antecesor el líder Nguyen Phu Trong, fallecido hace pocos meses.
Con esa concordancia de simpatías y respaldos, son muchos los años de recorrer la vida, con sus altas y bajas. En esta oportunidad, Díaz-Canel le reiteró al distinguido huésped las condolencias en referencia a los daños dejados tras el reciente paso del tifón Yagi, el cual llevó fuertes lluvias y vientos sostenidos de 118 kilómetros por hora, con rachas máximas de hasta 149 kilómetros. En lo tocante a nosotros, ponderó altamente el significado práctico de la asistencia técnica y el compartir importantes proyectos. Son, en tiempos semejantes cuando se prueba la valía de un afecto, de un ir cuesta arriba enlazados con los mejores sentimientos.
Algunos pasos en Cuba del amigo
Bohemia tuvo el privilegio de participar en calidad de reportera y fotorreportero, respectivamente, de este intercambio al más alto nivel. El siempre bello y lustroso Salón Portocarrero del Palacio de la Revolución, dio la bienvenida al amigo y a la amplísima delegación acompañante. Fue casi imposible evitar la emoción al escuchar los acordes de nuestros himnos nacionales, tantas veces espuelas, o presenciar el pase de revista ante la Guardia de Honor, luciendo los estandartes inspiradores en la defensa Patria y del internacionalismo proletario.
El Salón Rojo tuvo similar brillo, al acoger las conversaciones oficiales; ocurrieron cosas muy importantes. Una, fue cuando el mandatario antillano ratificó: “Cuba nunca se va a doblegar; nunca se va a rendir”. Aseguró que llega “una nueva Era”. Mientras, el importante representante vietnamita manifestó el compromiso del PCV de propiciar más estrechas relaciones de camaradería entre ambos países, Partidos Comunistas y Estados. A eso estamos acostumbrados. Entendemos seguirá siendo una constante, debido a la armonía bilateral, inspirada en la Historia, hecha de relativos pequeños relatos.
Dado el interés de nuestros lectores sobre lo que popularmente se dice la “concreta”, esta comentarista si bien subraya la significación esencial de los gestos simbólicos, admite la valía de las acciones. Es crucial destacar que a los anteriores acuerdos, esta vez las delegaciones firmaron siete instrumentos bilaterales. Cuatro se refieren a los vínculos interpartidistas y de sus relaciones internacionales; economía; producción; información e intercambio entre las estructuras territoriales de ambas organizaciones políticas. Otros se refieren a un Memorando de Entendimiento para la Cooperación entre el Banco Central de Cuba y el Banco del Estado de Vietnam, el cual prevé la formación, la supervisión bancaria, el sistema de pagos, la gobernanza del banco central, el desarrollo de recursos y otras áreas. Nadie objetará que ahora es muy necesario recibir cualquier respaldo similar.
Se suscribió una Actualización del Memorando de Entendimiento entre la provincia de Quang Tri y el Ministerio de Salud Pública cubano para desarrollar la colaboración en esa rama y los servicios académicos mutuamente beneficiosos. Una magnífica noticia brota del Plan de Cooperación entre los respectivos ministerios de Agricultura para la producción de arroz en nuestra tierra, ratio de cooperación estratégica. Como broche de Oro se anunció una Declaración Conjunta sobre el Fortalecimiento de la Solidaridad, la Amistad Especial y la Cooperación Integral en el nuevo período.
La asesina incidencia del bloqueo yanqui a Cuba tiene mucho que ver con la alimentación de la gente sencilla, trabajadora, de ahí el entusiasmo al saber del próximo donativo de 10 mil toneladas del necesario arroz. Recuérdese será una reedición, pues los vietnamitas son pródigos, generosos, ajustados a la filosofía “la comida es asunto serio”, aspecto que se tiene como elemento de la seguridad nacional de cada país, inclusive en aquel cuya pretensión es doblegarnos por hambre, sin lograrlo.
Son muchas las actividades desplegadas, algunas de importancia capital. En ese tenor se inscribe el recorrido efectuado por la Zona Especial de Desarrollo Mariel (ZEDM). Allí se les ofreció a los visitantes una reseña actualizada sobre la historia, potencialidades y oportunidades del enclave, el cual se precia de 5 negocios de la nación asiática. En esta ocasión se sumaron dos más. El dirigente foráneo aseguró que valora altamente la confianza cubana en el empresariado vietnamita; ratificó la disposición de apoyarnos ante las dificultades. Tanto Díaz-Canel como To Lam visitaron a la empresa Suchel TBV S.A., dedicada a la producción de detergentes de uso doméstico e industrial. Dialogaron también con trabajadores de ViMariel S.A., el cual programa, invierte, construye, administra y explota la infraestructura de un parque industrial en la ZEDM, siendo el primer concesionario de la renombrada zona.
Distinción a quien distinción merece
Las imágenes captadas por nuestro colega sobrecogen al apreciarse la emoción sentida por To Lam mientras recibía la Orden “José Martí”. Es justo que así haya sido al tratarse de la más alta condecoración implementada por el Consejo de Estado de la República de Cuba, como reconocimiento a su contribución a la relación de hermandad y cooperación binacionales. En su discurso de agradecimiento, el condecorado acentuó acerca de nuestra entrañable hermandad histórica; el carácter especial de la relación y la solidaridad mutuas, durante tantísimos años. Su visita, dijo: “contribuirá a darle un nuevo impulso a los nexos bilaterales y ratifica firmemente la especial amistad y alta estima del Partido, del Estado y del pueblo vietnamita hacia el Partido, el Estado y el hermano pueblo cubano”. Estamos convencidos que sus deseos se cumplirán porque forma ya parte de nuestra amistad. Cada niño cubano se adentra en la cultura anamita desde un José Martí respetuoso de lo diverso; admirador de la grandeza humana.
Para el encono de nuestros enemigos externos e internos, To Lam ponderó los logros caribeños en la construcción socialista a pesar de dificultades y desafíos.
Poco antes de partir, sucedió lo inevitable: el General de Ejército Raúl Castro Ruz lo recibió con un fuerte abrazo. Según despachos de Cubadebate supimos que ambos se refirieron a los históricos vínculos de amistad y al excelente estado de las relaciones entre nuestros pueblos, Partidos y gobiernos, y ratificaron la voluntad común de fortalecerlas. Este hecho patentiza el convencimiento de que siempre estaremos unidos; compartiremos sueños comunes, como quería Ho Chi Minh al interactuar con Raúl. O cuando, en 1973, Fidel le colocó a la tropa, la bandera de la victoria. Ninguna orilla, lo olvida.
Un comentario
Excelente resumen de una visita sin duda ya histórica, como la calificó Díaz-Canel. Se estrecha aún con más fuerza el abrazo de dos pueblos heroicos hermanados en las luchas y aspiraciones comunes de justicia, solidaridad, bienestar y felicidad compartida, con énfasis en el legado y protagonismo de sus respectivas juventudes. Y 2025 promete aún mayor profundización de estas relaciones ejemplares.Gracias a María Victoria, Jorge Luis y Bohemia.