Abarca las distintas manifestaciones del arte, crea valores y sienta bases para defender mejor al país
Parece que fue ayer, pero han transcurrido ya 50 años desde que nació, dentro del Ministerio del Interior, el movimiento de artistas aficionados.
La fecha, desde luego, no puede ser tangencial hoy para hombres y mujeres que -además de garantizar la seguridad del Estado, de la nación, la tranquilidad ciudadana y otras misiones- sacan siempre margen de su apretadísimo tiempo para hacer, además, arte, cultura.
Por eso, en todo el archipiélago hay festejos por estos días.
Los espirituanos, por ejemplo, acaban de realizar una magnífica gala cultural, que equilibró elementos de historia, valores y potencialidades del territorio.
El espectáculo reverencia, a su vez, la anónima, consagrada y decisiva labor de los órganos de la Seguridad del Estado desde su surgimiento, el 26 de marzo de 1959.
Como se sabe, dentro del MININT el movimiento de aficionados abarca también a las distintas manifestaciones del arte, fenómeno que tiene nítida expresión en festivales desde la base hasta escala de país.
Según explica el teniente coronel Rafael Lacerda Hernández, primer funcionario de la dirección política del Ministerio del Interior, lo mejor de esa labor debe hacerse sentir durante una gala prevista para el 13 de junio en el Teatro Nacional de la capital cubana.
“Es difícil imaginarnos sin ese movimiento de aficionados –añade Lacerda. Por medio de él se forman valores, aflora la sensibilidad artística y humana de nuestros compañeros, la población nos ve desde una dimensión más justa, más amplía y es una vía más para defender al país”.