Foto. / El Nacional
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París 2024: hechos que capturaron la atención del mundo

Los Juegos Olímpicos que recién finalizaron estuvieron repletos de acontecimientos que no solo “matizaron” la cita, sino que dejaron espacio para la reflexión alrededor de temas vitales como el amor, el respeto a la diversidad, la maternidad y la lucha por alcanzar los sueños, más allá de la edad


La pareja turca de tiro con pistola de aire que ganó la primera medalla para la delegación de su país. / olympics.com/

Los Juegos Olímpicos siempre han sido un escenario donde el deporte, la cultura y lo inesperado se entrelazan. La cita de París 2024 estuvo repleta de historias fascinantes, desde la propia inauguración, que levantó tanta polémica en redes sociales por las inusuales propuestas artísticas, incluyendo el sorprendente regreso ante el micrófono de la gran Celine Dion.

Para los cubanos, una de las escenas inolvidables fue, sin dudas, la victoria del luchador Mijaín López, y el momento en que se descalzó, besó sus zapatillas y las colocó en el centro del colchón, muestra de que, tras la meta de su quinta medalla de oro olímpica, ya podía dejar el camino a próximos campeones.

Como ese momento hubo otros impactantes que recorrieron las plataformas digitales durante estas semanas. Una de las historias más virales fue la del medallista de tiro turco Yusef Dikec, quien junto a su pareja deportiva, Sevval Ilayda Tarhan, ganó la medalla de plata en el equipo mixto de 10 metros de tiro con pistola de aire. El logro no solo marcó un hito como la primera medalla de Turquía en tiro olímpico, sino que también generó un gran debate sobre la visibilidad de las mujeres en el deporte. Curiosamente, las menciones sobre Tarhan fueron destacadas principalmente por medios asiáticos, mientras que la mayoría solo alabó la postura y aparente relajación del atleta masculino, sin apuntar que trabajaba a dueto. Según algunos, esto es reflejo de una tendencia preocupante en la cobertura mediática que omite las contribuciones de las mujeres en disciplinas mixtas, pues en gran parte de los titulares se aludía a “Yusuf Dikec y su compañera”.

La historia de la tenista china Tania Zeng, de 58 años, es una muestra de constancia y amor por el deporte. / olympics.com/

Desde los primeros días de competencias numerosas historias de superación comenzaron a recorrer las redes. Tania Zeng, una china de 58 años que ha vivido en Chile por más de 35, ejemplifica la perseverancia y pasión por el deporte. Tras vender muebles, durante la pandemia redescubrió su amor por el tenis de mesa al desempolvar una mesa en su casa y comenzar a practicar diariamente. Desde 2020 se unió al Club de Iquique, ganó la liga nacional y decidió dejar su trabajo el año pasado para dedicarse por completo a su sueño olímpico. Su dedicación la llevó a clasificar para París 2024, recordando que su madre siempre quiso verla como jugadora.

El evento también estuvo matizado por numerosos momentos románticos, como el protagonizado por el jugador de bádminton chino Liu Yuchen, quien sorprendió a todos al proponerle matrimonio a su compañera Huang Yaqiong, ganadora de la medalla de oro en la categoría de dobles junto a Zheng Siwei. El gesto no solo celebró su amor, sino también los logros de ambos, convirtiéndose en una pareja inspiradora dentro y fuera de la cancha. Este no fue un suceso único: según registran medios internacionales, unas siete parejas regresaron a sus países con algo más que medallas. Uno de los enamorados fue el remero estadounidense Justin Best, que no solo brilló al alcanzar la primera presea de oro para su país en remo en seis décadas, sino también al proponerle matrimonio a su novia, Lainey Duncan, con un impresionante gesto: 2 738 flores amarillas, simbolizando cada día que han mantenido contacto a través de Snapchat.

El jugador de bádminton chino Liu Yuchen le propuso matrimonio a su novia Huang Yaqiong, ganadora de la presea de oro en la categoría de dobles. / olympics.com/

El espíritu de la ciudad del amor igualmente tocó a los argentinos, pues Pablo Simonet, jugador de balonmano, sorprendió a su pareja, la jugadora de hockey María Campoy, con una emotiva propuesta. La escena fue capturada en un video que se volvió viral en Instagram. Además, las regatistas francesas Sarah Steyaert y Charlotte Picon se llevaron a casa medallas de bronce y anillos de compromiso, cumpliendo la promesa hecha por sus parejas tres años antes.

Sin embargo, estos sucesos no resultan tan insólitos frente a lo sucedido al atleta italiano Gianmarco Tamberi, abanderado de su delegación, quien debió escribirle una carta pidiendo perdón a su esposa, tras perder su anillo de bodas en el río Sena durante la inauguración de los Juegos.

“Si quieres, lanzaremos el tuyo a ese río, también, para que estén juntos para siempre, y tendremos una excusa más para, como siempre has pedido, renovar nuestros votos y casarnos con nuevos”, escribió en su romántica misiva.

La maternidad fue otra de las realidades que llamaron la atención y sirvieron para mover a la reflexión: la azerí Yaylagui Ramazanova consiguió avanzar hasta octavos de final en tiro con arco con más de seis meses de gestación, y la egipcia Nada Hafez, de esgrima, compitió con siete meses de embarazo.

“Mi bebé y yo tuvimos nuestra buena ración de desafíos, tanto físicos como emocionales. La montaña rusa del embarazo ya es dura de por sí, pero tener que luchar para mantener el equilibrio entre la vida y el deporte fue agotador, aunque mereció la pena”, escribió Hafez en su perfil de Instagram.

Otro ejemplo de impacto fue la influencia de la velocista estadounidense Allyson Felix, la atleta femenina de atletismo más condecorada en la historia olímpica con once medallas. Aunque se retiró en 2022, su impronta estuvo presente en París. Luego de denunciar a Nike por un contrato discriminatorio tras su embarazo, no solo logró que la empresa cambiara sus políticas, sino que influyó en la implementación por primera vez de una guardería en la Villa Olímpica por parte de la Comisión de Atletas del COI.

“Yo experimenté cómo es volver a competir con una hija y es todo un desafío. Es muy difícil llevar a tu familia al estar tan lejos de casa. Quedarse en hoteles, lavar biberones, alimentar a tu bebé en el estadio, saber quién va a cuidar de él… Aprendí mucho sobre cómo podrían mejorarse las cosas”, aseguró Felix.

En esa misma línea de pensamiento estuvo la campeona francesa de judo Clarisse Agbegnenou al ganar una medalla de oro (equipo mixto) y una de bronce (en los 63 kg, individual femenino). Ella declaró a inicios del evento que había decidido amamantar a su hija hasta que la destete. “Me he asegurado de sentirme bien físicamente, porque, por supuesto, hay un elemento de cansancio. Pero como madre que necesita estar muy presente para mi hija, pedí la oportunidad de tenerla conmigo durante los Juegos Olímpicos”.

Sin dudas, este magno acontecimiento estuvo repleto de situaciones sui géneris, aunque algunas no fueron tan felices. Varias páginas webs y perfiles en redes sociales se hicieron eco de un titular en el que se destacaba que un hombre había golpeado a una mujer en el ring de boxeo. El hecho al que se hacía referencia era a la pelea entre la boxeadora argelina Imane Khelif y la italiana Angela Carini, a quien venció en 46 segundos, lo que desató insultos transfóbicos en línea. Esto se debió a una supuesta “prueba de género” en un evento anterior donde estuvo involucrada la Asociación Internacional de Boxeo. No obstante, el Comité Olímpico Internacional (COI) asumió el control del boxeo para los Juegos de 2024, reafirmando que Khelif cumple con los criterios para competir.

Un portavoz del COI, Mark Adams, aseguró que “no es una cuestión transgénero. Sé que lo saben, pero creo que ha habido algunos reportes erróneos sobre esto”.

Según varios medios internacionales, Khelif presenta una condición biológica conocida como hiperandrogenismo. Esta provoca que ella tenga niveles elevados de testosterona, una hormona sexual que se produce tanto en hombres como en mujeres, aunque el sexo masculino genera aproximadamente 20 veces más que el femenino. Esto no convierte a Khelif en una persona transexual, sino que es cisgénero. En otras palabras, a la boxeadora se le asignó el sexo femenino al nacer y se identifica como tal en la actualidad.

Tras la oleada de críticas, la boxeadora italiana Angela Carini se disculpó por el trato que ofreció a la argelina, a quien no estrechó la mano al terminar la pelea. “No soy nadie para juzgar o tomar una decisión. Si esta mujer está aquí, por algo será”, dijo Carini en una declaración recogida por la agencia Ansa. Es preciso apuntar que Imane Khelif ganó la medalla de oro tras la tormenta de críticas en redes sociales.

Estos son apenas algunos ejemplos de entre las numerosas historias que trascendieron por estos días en Internet, los cuales muestran las complejidades a las que se enfrentan los atletas, quienes deben superar sus propias metas y retos físicos en busca de una medalla o un buen desempeño olímpico; pero también cómo se combina el deporte con la cultura de cada nación y cómo aún la humanidad debe enfrentar prejuicios y estereotipos que pueden surgir en el ámbito competitivo.

La interacción entre los atletas no solo refleja su preparación física, sino también sus valores y creencias, lo que puede dar lugar a malentendidos y tensiones. En este contexto es fundamental promover el respeto y la empatía, reconociendo que detrás de cada competidor hay una historia personal y cultural que merece ser valorada. Es esencial recordar que el verdadero espíritu del deporte radica en la unidad y el entendimiento mutuo, más allá de las diferencias.

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Un comentario

  1. Bellísima comentario ,cargado de un vocabulario extremadamente emocionante que nos traslada a los grandes momentos vividos durante la Olimpiada y la realidad más allá de los juegos,para los cuales los deportistas dedican años de vida y esfuerzos

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