Declaraciones a BOHEMIA de Dany Miranda, director técnico del equipo de Ciego de Ávila
Ciego de Ávila, el primer elenco clasificado a los play off de la III Liga Élite del Béisbol Cubano, pasó por el Estadio Latinoamericano como parte de la recta final de la etapa regular.
Con el boleto a los cruces en el bolso, conversé con Dany Miranda, mánager de los Tigres, a quien pude conocer antes en el Congresillo Técnico, efectuado a pocos días del grito de play ball, a principios del mes de marzo.
Cuando en aquella ocasión le comenté sobre las posibilidades de sus discípulos en la lid selectiva, me dijo lo siguiente: “Es un equipo joven y por tanto el grado de motivación es alto. No salir entre los favoritos del torneo nos puede dar ventaja”.
Algunas bajas precompetencia también hicieron dudar a los seguidores del plantel avileño, que por cierto, ostenta un historial de tres cetros en series nacionales (ediciones 51, 54 y 55).
Y ahora, cuando apenas faltaba un choque ante Industriales del cotejo particular en el Coloso del Cerro –habían ganado uno de tres– y otros cuatro pendientes frente a Las Tunas, los de la tierra de la piña acumulan 22 victorias y 13 derrotas, y ninguna combinación en lo que resta les dejaría fuera de la postemporada.
“Es un logro de todos los integrantes de la nómina y del cuerpo de dirección. Desde el primer día nos ocupamos de adaptar a cada jugador a nuestros métodos, sobre todo a los que venían de otros equipos como refuerzos.

“Muchos dudaron de nosotros, en cambio, aquí estamos. El secreto está en entrenar duro y no creer que nos las sabemos todas”, dijo el estratega.
–¿Cuáles dos refuerzos pedirá para la etapa de semifinales?
–Primero un lanzador, y en segundo lugar un jugador de posición, aún por definir en ambos casos. He tenido que hacer cambios a la defensa e improvisar en algunos momentos, cuando el partido lo amerita. Por eso necesito otro hombre capaz de cubrir al campo, y mejor si es en más de una posición.
–De hecho, los llegados desde otras provincias han sido clave en esta fase inicial. ¿Cuán importante fue el proceso de selección previo?
–Muy importante. Antes de que se acabara la Serie Nacional 63 empezamos a chequear a esos que consideramos atletas que, como se dice popularmente, se echan al equipo encima. A raíz de ese estudio hicimos la elección.
–¿Se imagina dirigiendo un elenco nacional?
–Yo fui muy criticado porque una vez, antes de ser mánager en series nacionales, me preguntaron que cuál era mi objetivo. Y respondí esto: dirigir un equipo Cuba. Pero uno tiene que proponerse metas para alcanzarlas, y esa es la mía.