Foto. / proyectoespacios.com
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Vibrante e inclaudicable

En bibliotecas y centros de altos estudios aguarda a los interesados en la arquitectura, el urbanismo, la convivencia en las ciudades, el futuro de La Habana, una antología donde resuena la voz crítica de Mario Coyula


¿Cuánto puede motivarnos un libro sobre edificaciones y urbanismo? Depende, en gran medida, de nuestro gusto por la materia; pero la balanza también se inclina a su favor si muestra imágenes y un diseño atractivos, impresión excelente, un buen papel y, ante todo, el nombre de un sobresaliente profesional.

Magda Resik, Carlos García Pleyán y Eduardo Luis Rodríguez coinciden en subrayar la relevancia de Mario Coyula. / Leyva Benítez

Mario Coyula. Arquitectura y más, a cargo de la editorial Boloña, cuenta con tales valores; entre estos, descuella qué expresó su autor y cómo lo hizo. Al respecto disertaron Magda Resik, directora de comunicación de la OHCH y de la emisora Habana Radio, el sociólogo Carlos García Pleyán y el arquitecto Eduardo Luis Rodríguez –no solo conocedores de su vasta obra, también del ser humano que fue Mayito, como lo llamaban sus colegas– durante la reciente presentación del volumen en el habanero Centro Promotor de la Arquitectura Moderna y Contemporánea, el Urbanismo y el Diseño Interior, o Casa de las Tejas Verdes.

Elogiaron su modestia y afabilidad, la pasión por los libros y la escritura; su estilo sobrio, elegante, al redactar; sus extraordinarios valor y sabiduría al plantear problemas candentes, en especial los males que desgastan a la capital cubana. Recordaron cómo sus opiniones apasionadas y enérgicas, aunque nunca carentes de “reflexión racional y duradera” –(al decir de Eduardo Luis Rodríguez), lo condujeron a controversias que no lo amilanaron.

Tomando en cuenta ese incansable bregar, las compiladoras de la antología: Rita María Hernández, Marta Aquino y María Eugenia Fornés, a quienes les tomó alrededor de cuatro años seleccionar textos representativos de lo publicado o compartido por el arquitecto en múltiples medios y espacios, decidieron colocar en primer lugar el ensayo ¿Cómo será La Habana?

Esta antología satisface un anhelo del Historiador de la Ciudad de La Habana, Eusebio Leal Spengler. / Leyva Benítez

En él Coyula contempla varios futuros posibles para la urbe: el “quietista”, donde por inercia irían deteriorándose numerosos espacios citadinos; el “cauteloso”, en el cual se desarrollarían proyectos tendientes a revitalizar la ciudad, como la recuperación del Malecón y la bahía, o el aprovechamiento de los espacios no utilizados de la Rampa –allí el desarrollo arquitectónico iría de la mano de las ofertas culturales y recreativas–, y se reforzarían los mecanismos de control urbano. El tercero sería el “pesimista”, caracterizado por el protagonismo de ciudadanos y funcionarios –por lo general con poca cultura y menos amor al patrimonio– cuyo poder adquisitivo o decisorio les permitiría manejar propiedades y terrenos, con el objetivo de transformarlos a su antojo. Advertía, además, que probablemente ocurriría una mezcla de escenarios.

Casi una década más tarde (este análisis vio la luz a mediados de 2014, en la Revista Bimestre Cubana) podemos reconocer el avance de ciertas premoniciones o clarividencias. Sin duda, Coyula hubiera perseverado en intentar evitarlo. Pero la vida no le alcanzó para poner en práctica lo señalado en el cierre del ensayo: “quisiera ver desde adentro lo que pasará y tratar de que salga lo mejor posible”.

Tras esos razonamientos, en el compendio ahora presentado, se despliega un amplio conjunto de escritos sobre urbanismo, con títulos sugerentes. Dos atrapan de inmediato la atención: De arquitectos, museos y ciudades. Historia de una mala pasión y Amor y odio. El río y la ciudad.

Luego encontramos un capítulo centrado en el devenir de la capital, el cual incluye, por ejemplo, los artículos En defensa de El Vedado, La lección de Alamar y Mirando atrás desde el futuro: La arquitectura habanera en 2000.

Las siguientes partes del volumen proponen entrevistas realizadas al profesor, diseñador, presidente de la Comisión Provincial de Monumentos de La Habana y rector de otros organismos y proyectos; asimismo, críticas, semblanzas, crónicas de su autoría y hasta un grupo de poemas que, según palabras de Eduardo Luis Rodríguez, “descubren al Coyula más privado, amoroso, paternal, estremecido por la vida”.

Entre esos materiales, El trinquenio amargo y la ciudad distópica: autopsia de una utopía es resaltado por el prologuista, pues lo considera “uno de los textos de análisis histórico y crítico más certeros de toda la producción nacional de crítica especializada, no solo arquitectónica”.

Dicha conferencia, leída en marzo de 2007 en el Instituto Superior de Arte (ISA), comienza de este modo: “Con el término Quinquenio Gris Ambrosio Fornet condensó no solo un tiempo más extenso de triste memoria, sino una concepción retorcida del mundo, construida sobre la intolerancia, la exclusión y el rechazo a lo nuevo y diferente. Para el entorno construido cubano ese período [usualmente enmarcado en los años 70 del pasado siglo] empezó antes y algunas de sus consecuencias han llegado hasta hoy, sumando al menos tres quinquenios. De ahí el término de Trinquenio, tan inexistente como ese lugar que no es, Utopía, al que todos queremos llegar pero no sabemos cómo”. 

No se piense que Coyula pretende aquí despotricar contra la Revolución Cubana, cuyas aspiraciones esenciales siempre compartió y defendió. Por el contrario, pone el dedo sobre desviaciones extremistas y oportunistas de su credo. De la misma forma delibera en torno a los dilemas del siglo XXI y apunta: “Analizar los problemas de hace cuarenta años no debe quedar como un ejercicio académico, ni una catarsis liberadora, ni tampoco vendetta […] Lo principal es aprender de esos hechos y evitar que se repitan […] Volviendo a los principios a veces olvidados de la dialéctica, hay que saber avanzar a partir de las contradicciones, no acallándolas”.

Quizás las anteriores citas han despertado el interés de los lectores por el resto del volumen. Lamentablemente no será posible adquirirlo en las librerías, pues se imprimió sin ánimo de lucro, con la colaboración de la Agencia Suiza para el Desarrollo y Cooperación, Cosude. Sus ejemplares se entregarán a bibliotecas, centros de enseñanza superior y otras entidades. Sin embargo, algunas de las disertaciones y entrevistas compiladas pueden descargarse de Internet.

García Pleyán aconseja empezar a leer los textos por sus últimos párrafos, debido al gran impacto que causan. Sin embargo, Rodríguez prefiere comenzar de la manera tradicional, recalca que “Mayito era un maestro en capturarlo a uno con las primeras frases, estimulantes”, y en estructurar todo el trabajo; por eso, tituló el prólogo El arquitecto que sabía escribir.

Sea cual sea el proceder elegido, estemos o no de acuerdo con algunos de los criterios esgrimidos por el autor, a nadie decepcionará la lectura de Mario Coyula. Arquitectura y más. Como bien insiste el prologuista, él “sabía que el mejor artículo siempre debe tener un buen comienzo […] y un mejor final, como remate de una reflexión inteligente. Ello, más la fluidez y elegancia de su redacción y la presencia oportuna de alguna dosis de fino humor […] conformaban la personalidad de su prosa”.

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8 comentarios

  1. TANIA, gracias por tu artículo, es muy claro y oportuno, pero como reconoces no es de manejo totalmente público al alcance de la mano… es por esta razón que te invitaría a que incitaras a que se produjera en medios históricamente públicos como la misma revista Bohemia, visiones y comentarios de los textos por separados con sus ilustraciones y ¿porqué no? hasta con fotos actualizafad de los lugares que se citan en ellos… Te agrdezco amiga, tu artículo y de antemano te agradezco lo que hagas por ayudarme en mi solicitud…UN ABRAZO Y GRACIAS

    1. Buenas tardes. Agradezco su comentario y me disculpo por no responderle antes. Coincido con usted en cuanto a lo justo y útil de divulgar el pensamiento de Coyula. Trasladaré su sugerencia a la dirección de la revista. Felicidades por el fin de año.

  2. Precisamente, si Arquitectura y más se imprimió sin ánimo de lucro, debería ser llevado a formato digital para que pueda ser leído por aquellos que no pueden hacerlo en biblioteca o centro de rstudios, por su movilidad o residencia fuera de Cuba,

    1. Buenas tardes. Tengo la espereranza de que así sea, pues a esa posibilidad se aludió, aunque sin dar elementos concretos, en la presentación del volumen. Le deseo un feliz fin de año.

  3. Muy importante Arquitecto, profesor, artista, creador y defensor del entorno urbano. También culto, atento y muy crítico sobre los enfoques técnicos, político-sociales que afectan (ó pretenden beneficiar el entorno). Muy trascendente y afable profesor, su clarísima visión de la ARQUITECTURA CUBANA, el ARTE Y la defensa de la CULTURA, ARTE, así como la arquitectura y su entorno. Urge atender su insistencia en la importancia del paisaje urbano, el cuidado y el control urbano! .

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