El evento se está llevando a cabo en Rusia, por decreto del presidente Vladimir Putin
Cualquiera que se detenga a leer las noticias sobre el Festival Mundial de la Juventud podría pensar que se trata de una continuación del evento tradicional celebrado desde 1947. Dada la situación contemporánea y la marcada participación de organizaciones internacionales, esa persona podría incluso considerar que esta edición es una de las más especiales.
Sin embargo, la actividad actual, que se está llevando a cabo en el balneario de Sochi, en el territorio federal de Sirius, en Rusia, del 1 al 7 de marzo, con la asistencia de alrededor de 20 mil personas de más de 180 países, es algo distinto.
El gigante euroasiático, que ha sido objeto de una ola de fobia promovida por los medios de comunicación y políticos occidentales, deseaba crear un encuentro propio. Fue el 25 de enero de 2023 cuando el presidente Vladímir Putin respaldó en una reunión la propuesta de acoger la conmemoración más grande para mayores de 18 años y menores de 35 años. El mandatario encomendó a la Agencia Federal para Asuntos de la Juventud, junto con el Ministerio de Educación y el Ministerio de Ciencia y Educación Superior, la tarea de desarrollar el concepto de cada una de las jornadas.
En este contexto, los organizadores no solo buscan fomentar el diálogo, sino también evitar que el mundo caiga en un abismo. De hecho, el logotipo retrata a representantes de diferentes naciones, culturas, religiones y convicciones unidos en un círculo abierto.
La mascota del festejo, la entrañable criatura Cheburashka, encarna los mismos valores: tratar al otro, por muy diferente que sea, con amistad y respeto. Además, las instalaciones construidas para los Juegos Olímpicos de 2014 se han transformado en una auténtica ciudad global.
Con respecto a la participación de nuestro país, el grupo está compuesto por delegados de base al Congreso de la Unión de Jóvenes Comunistas, reconocidos por sus logros. También destaca la amplia representación de sectores de la cultura. Todos ellos hacen escuchar demandas como el fin del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos contra Cuba. Asimismo, exigen el cese inmediato del genocidio perpetrado por Israel en la Franja de Gaza. Junto con ello, participarán en el homenaje a Hugo Rafael Chávez Frías.
El programa incluye diversos acontecimientos educativos, científicos y deportivos. Los invitados podrán participar en clases magistrales, debates, paneles; asistir a excursiones a pie, en autobús y en barco, visitar conciertos y programas de entrevistas con artistas famosos.
Los vínculos entre Cuba y Rusia han sido profundos y multifacéticos, caracterizados por la cooperación política y económica a lo largo del tiempo. En el marco del Festival Mundial de la Juventud, estas relaciones encontrarán un nuevo espacio para fortalecer los lazos y la comprensión y, por qué no, también con otros grupos.
