El reciente XI Congreso de Información Científico-Técnica y de la Informática en la Construcción (Cicons 2023) sacó a relucir algunos avances en el proceso transformación digital de ese sector empresarial
La “informatización de la sociedad” ha sido un clamor recurrente del estado cubano, al punto de aprobar una política integral para el perfeccionamiento de esta en 2017.
El uso de las tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) en cualquier esfera trae beneficios claros; y en el sector empresarial, se traduce a mayores utilidades por una mejor eficiencia en la gestión de recursos humanos, financieros, materiales o técnicos. De ahí la necesidad imperiosa de acelerar los procesos de transformación digital en el país.
En el XI Congreso de Información Científico-Técnica y de la Informática en la Construcción (Cicons 2023), ocurrido a finales de noviembre, se evidenció dicho propósito entre los más de 160 delegados presentes: muchos de los dilemas que se esgrimieron giraron en torno a cómo aplicar el desarrollo computacional en función de cambios productivos en esa industria.
Según Amaury Medida Moranti, viceministro de la Construcción, Cicons 2023 también fue un escenario propicio para estrechar vínculos con la academia mediante un diálogo con los centros de estudios universitarios, un enfoque que la alta directiva de Cuba viene impulsando desde hace varios años, pero que, en la práctica, no ha resultado de momento en un “abrazo” tan caluroso como se esperaría.
El Ministerio de la Construcción (Micons) demostró, además, que cuenta con varios proyectos de informatización, como el del Registro de Profesionales del sector y el de Constructores.
Por supuesto, muchas iniciativas tenían objetivos más específicos. Una de las ponencias en el congreso mostró, por ejemplo, un modelo geoambiental soportado en un Sistema de Información Geográfica, con criterios de sostenibilidad en la explotación de áridos utilizados como materiales para la construcción.
La utilidad de esa herramienta informática se justifica con el incremento de la extracción de áridos y la producción de materiales derivados en varias localidades de la Isla. Se vuelve indispensable ordenar dichos procesos de forma que se garantice, mediante un seguimiento periódico, el cumplimiento de las normas de calidad sin violar los preceptos de sostenibilidad del territorio. Para ello, hace falta información precisa y actualizada.
En una tónica parecida, una investigación de la Universidad de Camagüey Ignacio Agramonte Loynaz propuso un software –un Sistema de Gestión de Base de Datos (SGBD, exactamente)– para automatizar la organización del proceso de montaje de elementos prefabricados de hormigón armado.
Sin el apoyo de las TIC, deben determinarse “manualmente” varios parámetros que pueden repercutir en el encarecimiento de la obra: los equipos que se emplearán en el montaje, el orden; además, se trata de una tarea al aire libre, expuesta a factores atmosféricos, y pudieran surgir problemas como daños, producciones defectuosas, retrasos en el suministro de piezas, el almacenamiento de los elementos prefabricados, la preparación de la actividad de “izaje”… en resumen, son muchas métricas a tener en cuenta, pero con el SGDB se puede gestionar eficientemente, según los ponentes, todos aquellos datos.
Y en ese orden, más soluciones informáticas se expusieron en Cicons 2023, algunas, incluso, pensadas para cubrir una demanda de comunicación: un sistema que posibilitará al Centro de Superación e Investigación de la Construcción administrar la información referente a los cursos y eventos científicos y técnicos; una metodología para mejorar la gestión de una organización con el auxilio de herramientas de Google.
El viceministro Medina Moranti señaló que, de manera general, las iniciativas presentadas en el congreso aún son incipientes, porque la comunicación y la digitalización de los servicios atraviesan transversalmente a todas las áreas del desarrollo nacional donde la construcción no está exenta.
Para lograr una verdadera transformación –argumentó– se requiere de la participación colectiva y articulada, donde los centros investigativos y académicos ocupen un lugar esencial.
Y si bien parece difícil reducir las brechas existentes en ese campo del conocimiento entre los países del Sur Global y los desarrollados, es un camino inevitable que debe recorrer Cuba en pos de su desarrollo económico. Por ahora, en Cicons 2023 se divisaron algunas pisadas.
