Los delegados al XII Congreso de la UJC, antes de comenzar las sesiones en la capital, rindieron tributo a Julio Antonio Mella, en el obelisco frente a la Universidad de La Habana
Llegaron desde sus provincias y fueron directamente al obelisco a Julio Antonio Mella, ubicado frente a la Universidad de La Habana, antes de iniciar las sesiones del XII Congreso de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC).
Los delegados levantaron voces que identificaban a sus territorios de origen, pero prevalecían las arengas de unidad, lucha y victoria, acompañadas por canciones de Silvio Rodríguez y el dúo Buena Fe, que se dejaban escuchar por bocinas desde temprano.
Sólo hubo pocos minutos de silencio. Primero, cuando entonaron el Himno Nacional, y luego al depositar la ofrenda floral ante el monumento que perpetúa la memoria de Mella, definido por Fidel Castro como “el cubano que más hizo en menos tiempo”.
Tributo a aquel que firmaba artículos bajo el seudónimo de Cuauhtémoc Zapata, o Kim (El Machete), o Lord Mac Portland; al fundador del primer Partido Comunista de Cuba junto a Carlos Baliño, para dar continuidad a las ideas del Partido Revolucionario Cubano.
El homenaje sería justo para quien organizó, en 1923, el Primer Congreso Nacional de Estudiantes e inauguró la Universidad Popular José Martí con el fin de instruir a los trabajadores. Fue el joven que, desde las filas de la Federación Estudiantil Universitaria, inició la oposición contra la tiranía de Gerardo Machado; y que, cuando lo asesinaron en México, el 10 de enero de 1929, cuentan que estaba preparando la expedición que lo llevaría a Cuba a continuar guerreando por la libertad.
Los esbirros fueron incapaces de acallar su ejemplo, seguido hoy por miles de muchachas y muchachos que empinan banderas y gritos de continuidad de una obra forjada a golpe de sangre, de lealtad y ejemplo.
Jorge Luis Guzmán, secretario de la UJC en la Universidad de Ciencias Médicas de La Habana, explicó que desde hace muchos meses, entre todos, promovieron festivales deportivos, culturales, ferias de salud, exposiciones y apoyaron las transformaciones sociales en los barrios.
El XII Congreso es momento para debatir y promover estas y otras ideas, de unir fuerzas, para que las voluntades de Martí, Mella y Fidel sigan abriendo los senderos hacia el provenir.
