Fotos./ Yasset Llerena

Ese mar oceánico de títulos captados por el fotógrafo ante los ojos del lector invita a visitar el habanero Pabellón Cuba, una de las subsedes de la edición 32 de la Feria Internacional del Libro de La Habana. La capacidad de Yasset al ver y captar el instante preciso ilustra la dimensión del evento amplio, diverso, propositivo. Una madre y su hija dialogan sobre intereses comunes mientras deciden la elección de un libro de preferencia común. Por doquier adolescentes y jóvenes sienten curiosidad y deleite al detenerse en relatos históricos e ilustraciones. Muchos sienten la satisfacción táctil y la calidez del papel impreso. Lo valida el detalle descubierto intencionalmente al concebir la imagen.

En el amplio escenario se aprovechan las posibilidades  para estimular formas de sociabilidad que transforman el entorno y los grupos sociales. Presentaciones de músicos, proyectos comunitarios y otros aportes creativos completan los disfrutes en la fiesta del saber concebida desde las artes y las letras, pues ambas interactúan de manera dinámica y estimulan la participación de los públicos sin límites de edades o sexos.