La Feria del Libro de La Habana 2024 trajo ofertas en soporte digital. Las ciencias sociales y políticas se vistieron de largo

Al buscar en el diccionario de la Real Academia Española el verbo leer, este subraya que es transitivo, tratándose de “pasar la vista por lo escrito o impreso comprendiendo la significación de los caracteres empleados”. Nada que objetar salvo un detalle: ahora en la segunda mitad de febrero de 2024, o sea en el siglo XXI, habría que añadirle “compartido digitalmente”.

La 32 Feria del Libro de La Habana avanza al fragor de estos tiempos. Ese es uno de los grandes aciertos de la RUTH Casa Editorial, que en la actualidad cuenta con una “biblioteca” virtual de 1 300 libros de autores cubanos versados en todos los temas, cuya luz larga nos permite visionar partes de nuestro futuro. Debe mencionarse al cubano Centro de Investigaciones de Política Internacional (CIPI). Ambos han configurado una genial alianza que en última instancia beneficia a aquellos lectores y simpatizantes de asuntos de alto rigor científico.

Nada tendría sentido si no se le hace honor al conjunto de nuestros destacados investigadores. Sí, porque en Cuba la actividad de las Ciencias Sociales y Políticas tiene, gracias al triunfo revolucionario de 1959, un importante lugar en las ediciones del patio, contando asimismo con reconocimiento mundial.

En esta oportunidad, otra institución cimera ha ofrecido sus predios para el programa que nos ocupa; se trata del Instituto Superior de Relaciones Internacionales “Dr. Raúl Roa García” (ISRI), inaugurado por Fidel en su muy certera visión sobre la esencia de las cosas. Hablamos de un lugar que ha graduado a mujeres y hombres de nuestro servicio diplomático con depurado conocimiento de los hechos históricos y contemporáneos.

Interrelación fecunda de la mentada editora, el ISRI y el CIPI que en soporte digital ponen a disposición de los lectores de Cuba y del orbe obras valiosas. No podía ser de otra forma, porque el CIPI, desde 2016, gestiona el Programa Nacional de Ciencia, Tecnología e Investigación de Relaciones Internacionales. El propósito es articular la actividad científica en ese terreno a nivel nacional, hecho cierto a partir del amplio equipo de intelectuales de las ciencias sociales, menospreciadas en el mismo orden en que algunos asumen a la poesía como arte menor.

Desmontando un mito

Bohemia se acercó este 20 de febrero de 2024 al ISRI para escuchar de asuntos tales como La geopolítica de Francia en África. La propia Leyla Carrillo Ramírez, investigadora del CIPI, disertó sobre su publicado ensayo. La que esta reportera considera pieza fundamental si se busca un cabal acercamiento a la doble cara de París. “Aborda los orígenes, la transformación y la actualidad de la presencia colonial y neocolonial de la nación europea en los países donde ha dominado o mantiene su influencia política, económica, militar, social y cultural”. De igual manera, se refiere a los compromisos e interrelaciones que Francia “lleva a cabo con otros actores mundiales para preservar sus intereses en el continente africano entre los siglos XVII y XXI”, dejando claro que en esa región prosiguen las secuelas de la colonización. Si bien esta entrega está enmarcada en el período 2009-2019, puede devenir lectura obligada para próximas generaciones de pensadores y decisores.

La nación que lo ha trastocado todo

El subtítulo anterior pudiera ser como ese guante de seda que sirva de símbolo para, en pocas palabras, describir el formidable significado de la gigantesca nación asiática en la vida de hoy, pero mejor hagámoslo con Eduardo Regalado Florido y Elda Molina Díaz, coordinadores del libro China: hacia la modernización integral. Una perspectiva desde Cuba. Estamos en presencia de un enjundioso estudio de varios investigadores, quienes nos remiten a un “diagnóstico de las principales variables que determinan la dinámica económica, política, social, tecnológica, matriz energética, medioambiental y de seguridad del país asiático. El estudio se caracteriza por un análisis balanceado, en el que aparecen los principales logros, potencialidades y retos que enfrenta la nación”. Una de sus bondades radica en servir –no como oráculo, más como guía científica– para “poder proyectar escenarios a largo plazo”.

Una fructífera tarde

Como ya se ha dicho, la institución del ISRI fue la anfitriona de un encuentro alabado por la prensa, los estudiosos y el público en general, que de la mano de un haz de creadores, además de los materiales arriba reseñados, tuvo acceso a otros de tanta valía: Operación Militar Especial en Ucrania. Impactos económicos, políticos y militares en Rusia. Reflejo en la situación regional e internacional, cuyo coordinador es Raynier Pellón Azopardo; A 200 años del surgimiento de la Doctrina Monroe, coordinado por José Ramón Cabañas Rodríguez; Los problemas globales de la humanidad en el tránsito hacia la multipolaridad, de los autores Mario A. Padilla Torres y María T. Ortiz Gómez, y el No.9 de la Revista Cuadernos de Nuestra América, del CIPI. La cita estuvo presidida por Leyla Carrillo Ramírez; Carlos Tablada, director editorial de la Casa RUTH; Elio Perera, investigador auxiliar del CIPI; y por el ISRI, Omelio Caballero.

A esa tarde de “libros” acudió un enjambre de jóvenes atraídos por novedades que en apariencia pudieran asumirse como tediosas o complicadas. La pericia analítica y la versatilidad de la escritura de la escuela cubana de pensamiento hacen que semejantes análisis puedan calar hondo para una permanente formación político-cultural. Condición necesaria para calibrar los procesos históricos y sociales, que lejos de acabar siguen su en inexorable curso. Tener claridad de lo que pasó, lo que pasa o pueda pasar nos salva.