Miguel Díaz Canel Bermúdez, primer secretario del Comité Central del Partido y presidente de la República al clausurar la Primera Sesión de la Décima Legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular en el Palacio de las Convenciones de La Habana, dijo que por mucho tiempo vamos a recordar este encuentro por la complejidad del momento que vive Cuba, por los temas debatidos y cómo se discutieron

Ricardo R. Gómez Rodríguez

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“Aquí fueron más visibles nuestros problemas y también más visible el empeño por alcanzar el horizonte de las soluciones”, sentenció el mandatario al finalizar el encuentro que durante cinco días ha presentado y colegiado sobre los temas más acuciantes de la realidad cubana.

Sus frases iniciales las dedicó a una representación de lo mejor de la juventud cubana que hace 70 años asaltaba los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes. “Como mártires o como héroes, sin ellos mismos saberlo, iban a entrar en la historia”, afirmó y continuó: “Dos de aquellos muchachos nos acompañaron en esta sesión, el General de Ejército Raúl Castro, líder de la Revolución, y el comandante Ramiro Valdés Menéndez. A ellos, en primer lugar, quiero dedicar mis palabras”.

Precisó: “No se trata solo de un acto de justicia histórica, sino de dos hombres que continúan asaltando fortalezas todos los días con el pie en el estribo de las dificultades y el fusil apuntando hacia los errores”.

Consideró que el debate fue bueno, incluyendo el llamado de Esteban Lazo Hernández, presidente del Parlamento, y de otros diputados, a ponerle nombre y apellidos, causas y posible solución a nuestros problemas, “esos que no tienen que ver de manera directa con el bloqueo o que refuerzan el omnipresente bloqueo por inacción, apatía, insensibilidad, incapacidad o por simple cansancio y falta de fe en que será posible vencer las dificultades».

Añadió que se abordaron con sentido de urgencia y sin prejuicios los problemas de nuestra difícil cotidianidad, como la producción de alimentos, generación eléctrica, disponibilidad de agua, la delincuencia, la creciente inflación y los precios abusivos.

“Lo hemos hecho sin abandonar asuntos pendientes y de carácter estratégico como la política del Estado para la atención a la niñez, la adolescencia y las juventudes y la Ley del Código Penal militar”, dijo.

Destacó que se ha constatado en estos meses el vínculo de los diputados con la población, y al referirse a los intercambios con el pueblo en la calle, en los barrios, puntualizó que han sido la prueba de lo que significa trabajar con el oído pegado a la tierra porque… “Una asamblea en sesión permanente desconectada del pueblo que la eligió no puede llamarse nunca una asamblea del poder popular”.

Instó a evitar confusiones y agregó: “Justicia social no significa, ni se puede reducir, a asistencialismo ni igualitarismo. Es repartir la riqueza creada por todos entre todos, pero de modo diferenciado, de manera que gane más quien aporta más, y se asista fundamentalmente a los que están imposibilitados de aportar”.

Añadió que para ello primero es preciso crear esa riqueza, “y en esa tarea estamos lejos de aprobar todavía”, reconoció.

Recordó factores como la guerra económica y comercial de Estados Unidos contra Cuba, la crisis económica mundial, lenta recuperación de la pandemia y el efecto de conflictos bélicos, que continúan siendo obstáculos para la estrategia de reanimación de la economía en el corto, mediano y largo plazos. A pesar de ello, el informe de la economía y la liquidación del presupuesto del primer semestre del año manifiestan que las medidas, sin llegar todavía a resultados esperados, indican una muy ligera tendencia a la recuperación.

Al referirse a los debates sobre el sistema electro energético nacional, dijo que aún cuando éste no funciona en óptimas condiciones, se ha ido recuperando como parte de la estrategia trazada por el país.

Indicó que la situación en el mes de julio es mucho más favorable que en 2022 a pesar del incremento de la demanda y agregó: “Se han realizado mantenimientos a varias plantas térmicas y a motores de generación distribuida, por lo cual se ha podido recuperar capacidades y llegar a esta fecha en mejores condiciones”.

El discurso del presidente abordó el tema de la recuperación del turismo. Está esfera es afectada por la inclusión de Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo y otros problemas relacionados con la logística, combustible y energía. La rama no logrará los 3,5 millones de visitantes proyectados para el año, pero muestra un ritmo de crecimiento que debe superar todos los indicadores de 2021-2022.

El dignatario expuso igualmente que se ha iniciado el rescate de la intervención y ampliación del mercado cambiario, lo cual ha permitido canalizar al sistema empresarial más de 110 millones de dólares, con repercusión en la economía nacional, producción de bienes, servicios y destaque para los programas de producción de alimentos, como arroz, frijoles, huevos, carne de cerdo, la industria manufacturera y otros sectores, labor que calificó de aún insuficiente.

Al hablar sobre la inversión extranjera, comentó que como resultado de las visitas oficiales de los últimos meses establecieron las bases, proyectos y programas mutuos de inversión en sectores como energía y agricultura, incluida la industria cañera, dándose los pasos gubernamentales y empresariales para su materialización en el segundo semestre del año.

Ello permite crear condiciones para recuperar la capacidad industrial y de investigación, con impacto favorable en la rama energética y exportación de derivados del petróleo.

Díaz Canel adelantó que un grupo conformado por expertos de diferentes disciplinas ha trabajado en el diseño de medidas que permitirán avanzar en la estabilización macroeconómica durante el segundo semestre de este año y el primero de 2024. 

Acotó: “Este programa debe permitirnos corregir progresivamente los desbalances macroeconómicos” y se estudian propuestas para continuar el perfeccionamiento del mecanismo de asignación de divisas en función de las necesidades de desarrollo del país.

En los momentos actuales la economía cubana debe enfrentar una indispensable transformación estructural, acompañanda de un programa macroeconómico para los próximos tres años.

Sobre un aspecto de amplio interés popular señaló que, después de un debate tan intenso como el desarrollado sobre la producción y comercialización de alimentos, los precios abusivos, especulativos y el impacto nocivo en el nivel de vida de la población, es necesaria la correcta implementación de las medidas aprobadas y aprovechar las opciones que ofrecen la autonomía municipal y el fortalecimiento de la empresa estatal socialista.

Recordó que en las sesiones concluidas, aprobaron el nuevo Código Penal Militar, que está en concordancia con la carta magna y tiene relevancia para el fortalecimiento del orden y la disciplina en las instituciones armadas del país, elemento esencial para el cumplimiento de sus misiones, en función de mantener y proteger la independencia y soberanía del Estado, su integridad territorial, su seguridad y la paz.

También la política para la atención a la niñez, la adolescencia y la juventud, “como parte de la voluntad de fortalecer los derechos de la población más joven, por cuanto apoya sus aspiraciones y sueños. Esa política se origina en los amplios intercambios de integrantes de las nuevas generaciones y el sector académico. También responde “a la preocupación de nuestros compatriotas por el éxodo creciente de jóvenes y la necesidad de garantizarles que pueden desarrollar en el país su proyecto de vida, con una participación activa en los destinos de la nación”, aseguró.

Al referirse a los resultados de la intensa actividad internacional de los últimos meses, explicó que la presidencia cubana del Grupo de los 77+China “reclama un esfuerzo diplomático extraordinario que nos honra como nación”.

Más adelante puntualizó que desde la presidencia cubana, se han desarrollado con éxito eventos en materia de educación, cultura, turismo y medioambiente que han logrado incentivar el debate y contribuido a la defensa de los intereses de los países en desarrollo.

Díaz Canel informó que el 16 de septiembre venidero, Cuba acogerá la Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno bajo el tema “Retos actuales del desarrollo, papel de la ciencia, la tecnología y la innovación”, comentó que se trata de un esfuerzo necesario en el empeño de fortalecer el Grupo de los 77 y el aprovechamiento de herramientas tan importantes para el desarrollo.

El presidente indicó que todos los eventos en que participamos, son mecanismos de concertación en los que Cuba tiene una trayectoria de contribución activa y constructiva, como forma de nuestra política exterior.

El mandatario señaló que ante las agresiones de Estados Unidos, Cuba vence cada año en las votaciones de las Naciones Unidas y es respaldada por los pronunciamientos de organismos regionales como Celac, Caricom, la Unión Africana y la Unión Europea. “Nuestro deber es seguir denunciando esa política despiadada y progresar en el esfuerzo creativo de recuperar la economía y encaminarla sosteniblemente a pesar del bloqueo”.

Reconoció que en los recorridos internacionales encontró respeto, admiración y agradecimiento al pueblo cubano y a nuestra historia. Confirmó el valor de la coherencia, de la dignidad, de la defensa de los principios y de no ceder a las presiones.

Enfatizó, ¡Cuba no está sola en esta pelea y lo hemos comprobado. No somos los únicos castigados por defender nuestra soberanía, nuestra independencia y el multilateralismo!

Los 70 años del asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes, la participación altiva de las nuevas generaciones y la defensa de nuestra soberanía son razones suficientes para celebrar, pese a las carencias. Es la mejor forma de honrar a los héroes y mártires de la patria.