Cuba quedó tendida al campo ante Islas Vírgenes en la VI Copa del Caribe de Béisbol
NASSAU.-La selección cubana sufrió durante todo el encuentro, y acabó con la cabeza baja en el Estadio Andre Rogers.
En el final del séptimo y último capítulo, con dos outs en la pizarra y las bases llenas, Conroy Samael se convirtió en nuestro verdugo, con un batazo por encima del antesalista que trajo las dos de la ventaja definitiva para cerrar el marcador 6-5, ante los envíos del cerrador Sammy Benítez.
Desde el inicio el choque fue complicado. Varios errores mentales y malos tiros en el cuadro, además de un oportuno imparable, remolcador de dos, producidas por el cuarto madero contrario, Isranel Wilson, habían generado tensión en el banco de la tropa que dirige Alexander Urquiola, que llegó a estar perdiendo por diferencia de tres en la misma primera entrada.
Los muchachos a cuenta gotas habían conseguido remontar, hasta el desenlace final. Antes, fueron víctimas también de excelentes fildeos.
El abridor, Eliander Bravo, trabajó en cuatro completas y no tuvo decisión. Randy Martínez se ocupó de quinta y sexta, con una limpia a su cuenta, y Sammy Benítez cargó con el revés.
Lo cierto es que después de este resultado, en la VI Copa del Caribe todos los elencos han perdido al menos un juego.
Este sábado los nuestros, vigentes campeones del certamen, enfrentarán a los anfitriones en el horario nocturno, duelo para el cual han anunciado al zurdo Enyer Fernández como abridor.
