Es el primero en lograrlo y seguirán convirtiendo en azúcar más de 40 000 toneladas de caña que aún quedan por cortar… si las condiciones lo permiten
Fotos. / Pastor Batista
Directivos y trabajadores en general del central Melanio Hernández, ubicado en Tuinucú, Sancti Spíritus, tendrán el merecido privilegio de ser los primeros y únicos azucareros cubanos en desfilar este 1⁰ de mayo con el cumplimiento de su plan de producción correspondiente a la presente zafra.
Tal resultado emerge 125 días después de haber iniciado actividades, en el contexto de una contienda signada otra vez por adversidades materiales, válidas para el resto de los ingenios cubanos que hoy muelen.
Aun así, en la madrugada de este 30 de abril el Melanio cumplía su compromiso, registraba 3 178 toneladas por encima de las producidas el pasado año y reiteraba la decisión de continuar aportándole azúcar a la nación mientras lo permitan el comportamiento del clima y la situación energética.
Para ello, todavía se estiman más de 40 000 toneladas de caña por cortar, en plantaciones que habitualmente tributan gramínea, tanto allí como en áreas del coloso Uruguay, de Jatibonico, y del Heriberto Duquesne, en Remedios, Villa Clara, según declaró a la prensa Antonio Viamontes Perdomo, director de la empresa.
Los azucareros espirituanos logran un rendimiento industrial superior a lo planificado, mayor estabilidad durante las horas de molida, reducen el tiempo perdido en comparación con el año 2024 y lo enmarcan en el rango de lo que fija la nación desde etapas de esplendor en esa legendaria actividad.
En materia de generación eléctrica le aporta la red nacional unos 4 200 Megawatts, que significan más del 40 por ciento de sobrecumplimiento con respecto a lo fijado, mientras le entregan 346 horas vapor a la destilería, cuyo plan de producción se halla al 136 por ciento, hasta el día de hoy.
Aunque el aprovechamiento del rendimiento potencial cañero se comporta ligeramente por debajo de lo deseado, ese indicador mantiene aquí su mejor expresión a escala de país.
Destaca Viamontes, a su vez, los beneficios de la compensación de la zafra, con incidencia directa en volúmenes de caña enviados al basculador y en la actividad ferrocarrilera, a pesar de que no se ha logrado el balance necesario de carros jaula.
La presente zafra ha confirmado, además, como un elemento clave, la capacidad del central para mantener en puestos determinantes a hombres y mujeres de probada experiencia en sus respectivos oficios.
Como en otras ocasiones, el pitazo del cumplimiento originó una espontánea explosión de júbilo dentro de la industria, que pudiera repetirse en los ingenios cienfuegueros 14 de Julio y Caracas, los más cercanos al Melanio Hernández, si finalmente logran cumplir sus planes productivos.
