Cuba, sin poder jugar la final, por causa de la lluvia, quedó subcampeona en el torneo de béisbol de los Juegos Centroamericanos y del Caribe San Salvador 2023

Fue una verdadera pena este desenlace repentino. El equipo cubano de béisbol había ido en ascenso en los Juegos Centroamericanos y del Caribe San Salvador 2023. Y las esperanzas crecieron entre los aficionados.

Sin embargo, la lluvia impidió el partido por el oro, por lo que, una vez aplicado el reglamento, nos dejó con medallas de plata, por detrás de México.

Es cierto, los nuestros perdieron dos compromisos en la fase inicial. Puerto Rico y México habían sido los verdugos. Precisamente esa victoria de los aztecas en el debut fue la consecuencia del desenlace final: en los estatutos figura de ese modo.

Hace pocos días vimos como una cubana, la tiradora Laina Pérez, devolvía una presea de bronce, precisamente a una mexicana, Alejandra Cervantes, por tratarse de un podio copado por la misma nación, que violaba lo establecido en el reglamento del certamen.

Al parecer el karma, creencia que asegura que cada acción tiene una fuerza dinámica que regresa a su origen, le devolvió más adelante una medalla de oro en la modalidad de pistola de aire a 25 metros.

Sin embargo, esas energías no ayudaron a nuestros peloteros, que no conocen la gloria en la lid regional desde Veracruz 2014; recordemos que hace cinco años, en Barranquilla 2018, también quedamos segundos.

¿Seríamos campeones en San Salvador de haberse podido disputar la final? No lo sabemos, no obstante, se reconoció el espíritu competitivo de los dirigidos por Armando Johnson, que pasaron de ser el equipo más improductivo en los tres primeros choques, donde sumaron balance de una victoria y dos reveses -dejando un sin fin de corredores en circulación- a convertirse en la novena de mejor average al bate, además de ostentar la defensa más segura y un pitcheo asentado, que claramente se sintió menos presionado al trabajar con ventaja.

Los malos pasos del inicio parecían haberse diluido también con la lluvia, ya que -tras los tres primeros compromisos- sumaron cuatro éxitos en línea, así que acabaron con cinco ganados y dos perdidos.

Lo cierto es que las inclemencias del tiempo en ese pequeño país centroamericano, que hizo un gran esfuerzo por rescatar los juegos, afectaron un buen número de deportes con actividad al aire libre, no solo el béisbol.

Pero claro, nuestra mirada se detuvo en un inundado Estadio Saturnino Bengoa, pues en su grama se hundió la medalla que muchos esperábamos. Nómina había para el título. Mas llegó de plata, con la incertidumbre incluida de no haber disputado la final. Recordemos que últimamente no hemos salido airosos en el partido clave en eventos internacionales.

De cualquier modo, debemos reconocer el ajuste que sobre la marcha realizó el equipo. Ganáramos o no, allí se dejó una buena huella y se recuperó terreno perdido. Volver a ocupar puestos en el área es también clave, como lo es rescatar la confianza de los aficionados.

A propósito, la decepción de la lid fue Puerto Rico. El campeón defensor no solo quedó fuera del podio, sino que tampoco pudo colarse entre los mejores cuatro y garantizar un boleto para los Juegos Panamericanos de Santiago 2023.

Por cierto, el campeón México, el subtitular Cuba, Venezuela que ganó el bronce y el cuarto lugar, República Dominicana, estarán en la cita que acogerá Chile del 20 de octubre al 5 de noviembre próximos.

Finalmente, resumir con las palabras de Osvaldo Vento, presidente del Inder, quien reflejó así el desenlace de la pelota en su cuenta de Twitter: “Nuestro equipo creció con la competencia y dejó la imagen que merece su afición. Nunca se dio por vencido y puede regresar con la frente en alto”.

CRÉDITOS

Fotos: Roberto Morejón