Los Vaqueros de Montería derrotaron a Agricultores 5-4 en la Serie del Caribe de Venezuela y les dejaron con escasas opciones de avanzar a semifinales
Una vez más los bates de la novena cubana sonaron poco en tierras venezolanas. Apenas conectaron seis imparables ante un pitcheo con tendencia al descontrol, que nos regaló dos boletos y pegó tres pelotazos. Sin embargo, las conexiones no llegaron a la hora buena y las puertas de los cruces a semifinales están casi clausuradas para los nuestros, cuando restan dos compromisos de la etapa regular.
En su quinta presentación la tropa que dirige Carlos Martí sumó el cuarto fracaso en línea que, unido a un solo éxito, conforman un balance que nos pone a nada de la eliminación, donde apenas una complicada fórmula matemática basada en combinaciones de resultados ajenos nos dejaría con vida más allá de la primera ronda de partidos.
La dirección del equipo hizo movimientos en su line-up, basados en el rendimiento previo, después de encadenar las anteriores tres derrotas que nos ubicaron en la última plaza entre ocho participantes, pero no valieron de mucho. Guillermo Avilés subió al tercer puesto y Denis Laza fue al quinto, mientras que Yordanis Alarcón bajó al sexto turno y Rafael Viñales al séptimo.
En cambio fue la tanda de Colombia la primera en producir en el moderno Estadio La Rinconada, de Caracas, cuando en el tercer inning un largo batazo por el right field del tercer madero Jordan Díaz trajo a dos compañeros para el plato.
No obstante, Agricultores respondió en el siguiente capítulo. Yordanis Alarcón daba sencillo hacia la banda contraria y empujaba dos para la causa verde limón. El batazo provocó cambio de lanzador. Hernando Mejía, a la postre ganador, sustituyó al abridor Randy Consuegra, quien dejaba la pizarra igualada después de ponchar a dos rivales y permitir tres imparables en 3.2 inning.
El marcador no se movió más hasta la quinta entrada, en la que un jonrón de Gustavo Campero con un hombre en circulación provocó la salida del box del abridor cubano Jonathan Carbó, quien cargó con el revés al dejar la diferencia en contra, tras recibir siete imparables, entre ellos tres extrabases, ponchar a cuatro y regalar un boleto, en cuatro episodios de labor. Yoel Mogena hizo entonces su primera salida como relevista en el certamen, después de una mala apertura previa, en aquella desafinada paliza ante Venezuela en el juego tres, donde solo pudo sacar un out.
De inmediato el cuarto bate Jesús Marriaga traía la quinta anotación para los sudamericanos con un oportuno texas de buena ubicación y los de la tierra del café se encaminaban al éxito.
Cuba descontó dos en el sexto episodio y puso diferencia mínima, pero se quedó corta. La primera por doblete de Rafael Viñales, su primer imparable del certamen, y luego Andrés de la Cruz daba hit al center field y traía la cuarta, ante los envíos del relevista diestro Samuel Burgos, quien laboró hasta la octava entrada. En el noveno Jhon Peluffo, cerrador habitual de los Vaqueros de Montería, colgó el último cero a la escuadra antillana.
Miguel Paradelo vino en el séptimo inning –táctica correcta– relevando a Mogena antes de que los bateadores contrarios se adaptaran a él. Y el zurdo de Media Luna lo hizo perfecto. Retiró a seis por su orden con dos ponches incluidos en un par de entradas.
Así que los nuestros cedieron ante el vigente campeón del torneo, más allá de que hace un curso se trató de otro equipo de la nación colombiana, los Caimanes de Barranquilla, quienes doblegaron 4-1 a República Dominicana, local y favorita en aquella final, para que un club cafetero se coronara por primera vez en la lid regional.
Este martes los nuestros se enfrentarán en el sexto partido a los Indios de Mayagüez, de Puerto Rico, desde las 12 del mediodía, hora cubana, con remotas posibilidades de avanzar a la ronda de cruces.
CRÉDITOS
Fotos. Calixto N. Llanes
